RECA CAMPUS

Buena atención al cliente.
Las gambas estaban exquisitas, y la oreja frita también.
Sin embargo, su carta de vinos es escueta y teniendo tanto pescado nos sorprendió que no tuvieran variedad en vinos blancos.
En cuánto a la calidad del solomillo es el punto negativo, la carne no era lo esperado, y 24€ un solomillo descongelado y hecho filetes...

Por lo demás bien.

Llamémosle peregrinaje de hospitales a mi selección de bares y restaurantes de estos días. No hay más remedio. Hoy me decanté por el Reca Campus que imagino que llevará este nombre por el campus de la salud. Bien, pues me animé a pedirme una caña , con la que me pusieron una tapa de ensaladilla rusa que tenía un buen sabor, suave. Luego pedí solomillo de cerdo. El plato salía a 15 euros y me esperaba algo más de cantidad, pero bueno, quizás así me venga bien para la dieta. Los camareros son resolutivos y hacen una buena labor recomendando algunos platos. Observé que hay bastante oferta de pescado también. Bien alto!

Acogedor restaurante en el corazón del PTS, con mesas interiores y terraza exterior, buen y atento servicio, variedad de tapas de buen nivel, y raciones de todo tipo, incluso pescado fresco diario, bastante buenas aunque un poco escasas de cantidad para el precio que tienen; Destacaría la de chips de oreja por su originalidad y exquisitez; También apto para sobremesa y copas; En resumen recomendado pero deberían poner platos con más materia

Precioso local con muy buen pescado pero un mal detalle del propietario hará que no vuelva más. La música está demasiado alta, pedimos que la bajarán dos veces y la repuesta fue que así le gustaba al dueño. No se podía ni entender a los camareros. Definitivamente no creo que sea el lugar para tener la música tan alta.

Buen sitio para comer, terraza amplia y con atención personalizada y muy agradable. Menú variado con todo tipo de comidas para diferentes gustos. No dejes de probar la fritura de pescado, muy conseguida y nada aceitosa. Precios algo altos, pero acordes con la calidad de la comida.

Este verano fui al RECA porque es un sitio que nos solía gustar mucho por el pescado tan rico que ponen de tapa. Sin embargo, cuando fuimos esta última vez, fuimos con una persona INTOLERANTE AL GLUTEN y a LA LACTOSA pensando que en este sitio conocerían un poco del tema y sabrían respondernos.

El resultado fue NEFASTO. En la carta no ponían la lista de alérgenos correctamente ya que nos fijamos que las croquetas no tenían marcado ni el alérgeno de lácteo (por la bechamel) ni de Gluten (por el rebozado).

Aun así, preguntamos al camarero que había que podía ofrecerle sin gluten y sin lactosa a esta persona y no supo decirle bien. De tapa le puso 3 rodajas de tomate. Pedimos un pulpo a la gallega y unos caracoles. NOS ASEGURAMOS DE QUE NOS DIJERAN SI TENIA GLUTEN Y LACTOSA O NO y nos dijeron que NO.

Esta persona se tuvo que ir antes de lo mal que se puso.

CONCLUSION: Buen sitio para ir si no tienes ninguna alergia y/o intolerancia, pero si la tienes NO VAYAS.

5 estrellas para un bar clásico de Granada que ha sabido innovar y reinventarse donde a parte de su ubicación cabe destacar su buena comida y en especial su excelente servicio

Uno de mis mejores sitios en Granada. Trato perfecto, comida magnífica y ambiente súper.
Traigo a mis amistades aquí y también están muy contentos y satisfechos