Bar Pacos

Fuimos por recomendación de uno de sus vecinos, nos gustó tanto que repetimos varias noches. Ambiente tranquilo, buen vino, buenas tapas, raciones generosas, y el personal super atento. Seguro que volveremos!

Poco se habla de este restaurante. Lo cierto es que fuimos buscando mesa a dos locales que nos apetecía probar y ambos estaban completos. Y aquí se aplica eso de “lo que sucede conviene”. Vinimos a Paco’s, el bar estaba lleno y nos atendieron en la sala contigua. Para empezar fuimos estupendamente aconsejados por Juan Fidel, y probamos “la tapa”, un ochío (un panecillo tipo brioche pero hecho con aceite de oliva y pimentón, típico de la zona) relleno de una ensaladilla de cangrejo. Seguimos con un plato de queso, espectacular, que era de cortesía por el vino pedido (Fernández de Piérola, crianza, que nunca defrauda). Un calamar a la andaluza, un carpaccio de buey y unas berenjenas rebozadas con miel. Todo en su punto, nada aceitoso. La relación calidad-precio es mucho más que buena y las raciones son generosas. Tanto Juan Fidel como Pablo, su ayudante, estuvieron pendientes de todo y fue un auténtico placer cenar aquí. Lo recomiendo absolutamente. Estés o no en el hotel, es una propuesta que no debes perderte si estás en Baeza.

Súper rico y súper barato. Las tapas muy bien hechas, se eligen con cada consumición. Incluso nos pusieron una de más cuando solo pedimos una bebida, para que pudiéramos probarla los dos. Pedimos la pipirrana de garbanzo y la sepia frita, ambas cosas riquísimas y abundantes para el precio tan bajo que tenían. Camarero súper atento y simpático. Literalmente solo una cosa mala: por favor, cambiad la música! No apetece escuchar algo tan machacón en un sitio tan bonito y tranquilo!

Tapeo de calidad. Las croquetas y la morcilla espectaculares. El camarero es una pasada. Atendió al local lleno, estando solo, y no olvidó detalle alguno. Enhorabuena por ser tan profesional. El hotel es precioso

El bar es pequeñito pero muy acogedor. Un sitio para cenar tranquilamente sin ruidos ni voces. Hay variedad de tapas y raciones. El camarero muy atento, esa noche solo había un cocinero para el bar y el salón del hotel y el camarero pidió disculpas a cada momento por la tardanza pero no tardó tanto en servir las cosas.

Decepcionante con el servicio, y las maneras de atender del personal. Siendo una descompensación a la hora de servir y degustar en el momento adecuado, trayendo la bebida por un lado y tardando más de la cuenta, en las tapas o raciones. Mala información desde el principio. Una vez pedida la bebida y comida, cuando los comensales piden una botella de vino, es cuando avisan, que hay seis tapas con la misma, en vez de decirlo al principio, que es lo suyo, como tiene que ser. Además, hubo veces de tener que pedir la bebida en varias ocasiones. Hay que ponerse las pilas, sin lugar a dudas. Como el servicio falle, como es el caso, lo demás secundario. La degustación de lo que pusieron, de innovación y calidad, que también la pagas, claro. Espero que mejoren y mucho. En Baeza, tienes muchas y mejores opciones, a día de hoy.

Magnifico bar para comer y tapear, de gran calidad y buen precio. El personal es muy amable y atento. Con cada consumición sirven una tapa gratis denominada "cortesía" que se puede escoger de una lista bastante extensa. Aparte, tienen una amplia carta de raciones. Sólo una pequeña observacion: por favor, cambien el estilo de música. Escuchar de fondo reguetón todo el tiempo llega a ser bastante cansino.

Buena cocina casera, precio asequible, menú del día 12€ (solo a mediodía) con platos contundentes. El servicio es familiar, son muy atentos y eficaces. Está un poco anticuado el local (servicios sobretodo) por lo demás muy bien. Recomendable.