Comimos genial es el segundo año que venimos a éste pueblo de la sierra de Cádiz y es maravilloso, el precio es económico y la calidad es muy buena, el servicio cercano y agradable, volveremos sin duda
Rise and Shine.2 años atrás
Todos los veranos viajamos a ALGAR con el fin de poder pasar un buen fin de semana en grupo compitiendo en un marathon de fútbol sala que se celebra allí, desde hace más de 10 años nuestro lugar para comer sin dudas siempre es este y nos gustaría decir que el trato, la calidad de sus productos y sobre todo el precio no deja de asombrarnos, sobre el trato por parte del personal es inmejorable. Gracias un año más por todo.
Jorge Manzano2 años atrás
Muy buena atención y servicio rápido a un gran precio. Las tapas son muy generosas y baratas y con mucho sabor, disfrutamos cada una que pedimos, el único problema es que aparentemente usan el mismo aceite para freir diferentes platos, por ejemplo las croquetas tenían un ligero sabor a pescado. Cada tapa viene acompañada con patatas fritas, un buen detalle. El camarero que nos atendió fue rápido y atento. Muy recomendable.
Dsocire2 años atrás
Excelente atención todo muy limpió muy bonita la decoración... Precios excelentes y excelente comida
Juan MA2 años atrás
Se desayuna, se come y se tapea estupendo. El precio según calidad precio muy bueno. El sitio, en plena calle principal, comes y estás entretenido.
Luis Cabezas2 años atrás
En una calle peatonal con toldos y fresquita. El camarero súper agradable. Vine a dar un paseo sin dinero y me invitó al café. De los sitios para volver!
Raúl Arranz Peinado2 años atrás
Vinimos de Sevilla a pasar unos días en Algar. Nos pusimos a recorrer sitios para comer y al final nos decidimos por este...acertamos. Menos el día que cerró por descanso, los demás comimos y cenamos allí a pesar de haber más por la zona. Si estás buscando comida en platos grandes cuadrados y adornaíta con perejil picaíto no es el sitio. Comida casera, de verdad, de toda la vida, elaborada por la Señora de "Manolito. Comimos de menú a un precio más que razonable, con cantidades suficientes y bien preparadas. Las cenas eran más a base de tapas o montaditos que también son bastante buenos. Nos atendía "Manolito" (yo le decía Manuel). Un tipo servicial, con mucha experiencia, buen trato, educado, muy pendiente de todo, detallista. También tiene una camarera (María) muy joven, pendiente, algo más inexperta pero con mucho interés y voluntad, rápida. La verdad es que te atienden rápido y no tienes que esperar mucho para que te sirvan y eso que suele estar hasta la bola. En general fue una buena experiencia y un acierto el aventurarnos en entrar en este bar. El último día nos despedimos con bastante confianza y cierta pena. Bueno no, el día que nos íbamos mi mujer hizo unas compras en el pueblo y decidió pasar por allí para comprarles lotería. Charlamos otro rato y a su señora le dije que si veníamos otra vez, iba a comer todos los platos que pudiera a ver si alguno no me gustaba... reía. No sé si volveremos pero si lo hacemos y ellos están allí, no habrá otro lugar al que ir.
Las tapas son muy generosas y baratas y con mucho sabor, disfrutamos cada una que pedimos, el único problema es que aparentemente usan el mismo aceite para freir diferentes platos, por ejemplo las croquetas tenían un ligero sabor a pescado. Cada tapa viene acompañada con patatas fritas, un buen detalle. El camarero que nos atendió fue rápido y atento. Muy recomendable.
El precio según calidad precio muy bueno.
El sitio, en plena calle principal, comes y estás entretenido.
Menos el día que cerró por descanso, los demás comimos y cenamos allí a pesar de haber más por la zona.
Si estás buscando comida en platos grandes cuadrados y adornaíta con perejil picaíto no es el sitio. Comida casera, de verdad, de toda la vida, elaborada por la Señora de "Manolito.
Comimos de menú a un precio más que razonable, con cantidades suficientes y bien preparadas. Las cenas eran más a base de tapas o montaditos que también son bastante buenos.
Nos atendía "Manolito" (yo le decía Manuel). Un tipo servicial, con mucha experiencia, buen trato, educado, muy pendiente de todo, detallista. También tiene una camarera (María) muy joven, pendiente, algo más inexperta pero con mucho interés y voluntad, rápida. La verdad es que te atienden rápido y no tienes que esperar mucho para que te sirvan y eso que suele estar hasta la bola.
En general fue una buena experiencia y un acierto el aventurarnos en entrar en este bar.
El último día nos despedimos con bastante confianza y cierta pena. Bueno no, el día que nos íbamos mi mujer hizo unas compras en el pueblo y decidió pasar por allí para comprarles lotería. Charlamos otro rato y a su señora le dije que si veníamos otra vez, iba a comer todos los platos que pudiera a ver si alguno no me gustaba... reía.
No sé si volveremos pero si lo hacemos y ellos están allí, no habrá otro lugar al que ir.