Bar Pirineos

Muy rico todo y muy amable el camarero

Estábamos de paso y eran fiestas en el pueblo. Pedimos unas bravas, congeladas y bastante malas, también unos bocadillos que no estaban mal, pero no nos dieron ni servilletas, ni vaso para la botella de agua... Había muchas moscas volando y muertas en el suelo. Quizá en cocina tenían mucha faena preparando las cenas para esa noche, pero en barra y en ese momento el trabajo era más bien relajado, por eso nos extrañó la falta de interés en servirnos con más detalle. El baño de mujeres estaba limpio.

Uno de los camareros, desconozco si es el dueño, nos trató con muy poco respeto. Intentamos pedir uno de los platos combinados eliminando uno de los ingredientes y con muy mala educación nos dijo que eso no era posible. Riéndose en nuestra cara nos dijo que si no nos gustaba que nos fuéramos.

Muy mal servicio… nos fuimos muy descontentos con el trato de uno de los camareros. Muy maleducado y nos invitó a salir por solicitar quitar un ingrediente de un plato combinado. (Recomiendo seguir la calle un poco hacia el centro del pueblo, que hay una pizzería con platos muy ricos y dan cena entre semana).

Servicio y comida pésimos y además caro. Y un montón de moscas. No recomendable.

Muy buen servicio y todo muy bueno

Buena comida a buen precio. Trato muy amable.

Ya siento escribir una reseña mala, de las tapas y comida no puedo opinar, porque después de estar media hora sentados sin que nadie se dignara a atendernos, se ha acercado un señor que nos ha dicho que estaba reservado, señaló que llevaban media hora observándonos, pienso que eran fiestas y lo han ocupado con algún conocido porque sino no lo entiendo, si está reservada se dice desde el mismo momento que nos hemos sentados y nos hubiéramos quedado contentos, entendiendo que si hay una reserva hay una reserva