BALCAO BAR

Un restaurante super agradable con un trato profesional a la vez que cercano.
El ambiente es tranquilo. Se nota un gran cuidado y buen gusto en detalles como la vajilla y en el mantel-menú tan bien maquetado.
La comida está exquisita. Todo lo que comimos nos encantó; mención especial a ensalada de bacalao con pimientos de piquillo, la escalibada con bonito y el cachopo. Los platos son muy abundantes y están fenomenal de precio.
Recomendadísimo.

Restaurante pequeño muy agradable. La carta no es muy amplia, pero sí variada y todo lo que probamos estaba riquísimo. Todos los platos caseros (las raciones son bastantes grandes, ideales para compartir entre 2 o 3). Opciones vegetarianas. El servicio rápido y el personal muy amable. El precio muy razonable. Y respecto a la limpieza, desinfectaban enseguida las mesas entre cliente y cliente.

Bar con mucho gusto y comida muy bien preparada!!
Situado en una plaza tranquila.

Siempre he comido muy bien. Comida muy rica casera y abundante. Lo atiende la dueña y es amable y mantiene una limpieza escrupulosa. En época de bonito..no os lo perdáis al igual que su lasaña de verduras y la tarta de naranja. Precio medio de 15 a 25 euros.

Un lugar muy agradable, con rica comida, buen precio y una dueña muy atenta y agradable.
Lo descubrimos por casualidad y nos gustó mucho.
Respecto a limpieza, todo perfecto, desinfectando mesas y sillas al terminar cada cliente 👌🏻👍🏻

La carta que tienen muy rica y original, postres como podéis ver igual y muy buen trato, negocio propio cuidado con esmero

Fuimos recomendados por una casa rural y fue todo un acierto. Por la tarde fuimos a tomar unas cervezas a la terraza con dos perros y aprovechamos para reservar. La mujer que nos atendió nos dijo que parte de lo que venía en la carta era para compartir. Menos mal que lo advirtió! Pedimos solomillo de cerdo con salsa de hongos y fue espectacular: la carne se deshacía. Venía con champiñones, patatas y pimientos verdes. Antes de ello, nos sirvieron de cortesía dos cachitos de pimientos rellenos de tortilla, muy muy ricos también. Compartiendo plato, fuimos incapaces de comer más. El solomillo, 18 euros, pero de categoría.

Balcao bar no es una sidrería, tampoco es un restaurante de cocina tradicional asturiana, por lo tanto hay varios comentarios que no termino de entender.
Al margen de esto, diré que es una pequeña casa en el centro de Panes (Asturias) reconvertida a restaurante, regentado por mujeres, y que está muy cuidado y bien decorado.
La atención es buena, cercana y profesional, aunque sin entrar en una confianza excesiva.
La carta no es demasiado extensa, pero ofrece cocina de calidad y en cantidad más que suficiente; platos creativos, y como referencia tradicional un cachopo más que aceptable. Postres caseros espectaculares.
Relación calidad precio aceptable; no es sitio para ir todos los días, pero desde luego merece la pena probarlo durante tu estancia en la zona.