La Leñera

Fuimos un sábado a la hora de la comida y nos esperábamos una barra más grande de pinchos, por lo que habíamos leído en las reseñas . Sin embargo solo tenían 3 tipos de pinchos diferentes. Fueron los que pedimos, estaban ricos.
El camarero que nos atendió fue muy simpático.

Guiados por las reseñas de Google decidimos ir a este bar para comer unos pintxos y así matar el hambre que teníamos. El local antiguo pero con encanto, de los que ves y piensas aquí se tiene que comer muy bien. La primera impresión fue de un chasco Gordo al ver ls barra bastante desangelada de raciones y pintxos. Esperábamos más variedad pero aún así nos quedamos y consumimos dos bebidas y cuatro pinchos. Estaban ricos los pintxos, correctos, bien, pero tampoco algo excepcional. El precio? Eso si, muy buenos precios porque todo eso pagamos 10€. Buena desinfección de mesas y protocolo anti covid.

Fuimos a conocer Mundaka y caímos por casualidad acá!
El lugar no dice mucho, pero los pinchos son ESPECTACULARES!! Recomiendo probar los 2 de cangrejo y el de ventresca con pimientos.
Los chicos que atienden súper amables y en todo momento dispuestos a recomendar.
Sin dudas una buena opción si estás por la zona.
4 pinchos,1 caña y 1 una copa de vino aprox €11

Una taberna donde se come bien y a buen precio. Las tortillas de patatas jugosas y en su punto, espectacular la de cebolla. El pincho de chistorra, huevo y patatas genial. No es lujoso pero si vuelvo a Mundaka repetiré. El personal agradable y rápido.

Taberna pequeñita pero acogedora para tomar unos pintxos. No nos sorprendieron en exceso, pero nos gustaron.

Lo mejor del sitio son las personas que te atienden
Cerveza fría, pinchos, buena música y buenos precios
Un imprescindible si vienes a la zona

Antes de nada decir que llegamos sobre las 15:00, por lo que no puedes esperar que la cantidad de pintxos a esa hora sea espectacular, éstos bares funcionan así y tienes que ser consciente de que eres tú el que debe amoldarse. Aún así arrasamos con lo que había. Mención especial a la tortilla recién hecha espectacular y las gildas, que saborearas durante un rato largo. Por lo demás muy buen trato, buena música y en general un sitio para estar agusto.

Buen servicio,los camareros muy amables,para mí los pintxos más destacables las hamburguesas de Ali Oli y barbacoa y la tortilla de patata con cebolla recién echa a la noche,sitio agradable para potear o tomar una copa.