Carmín

Elegimos esta cafetería para desayunar porque nos convenció su amplia terraza con sol y el llamativo cartel de 'tortillas variadas': pedimos tortilla con cebolla y también con jamón y queso, poco hechas, y ambas estaban bastante buenas. El café, sin embargo, lo hemos tomado mejor en otros sitios. Atención y precios correctos. Su ubicación en el Paseo del Espolón le da puntos.

Las mejores tortillas de Burgos! (Y hemos probado bastantes). Y el camarero muy amable y servicial.

Céntrica ubicación y terraza amplia con buen servicio, camarera muy amable. Los desayunos a buen precio, aunque quizás se agradecería un pincho un poco más grande de tortilla, pero está exquisita. Muy recomendable

NO LO RECOMENDAMOS!

Estábamos pasando un agradable día por Burgos y decidimos ir a tomar unas cañas (no jarras) a este bar que, des de fuera, nos pareció correcto.

Pero nuestra idea cambió por completo a la hora de pagar: 2'60€ cada caña... 5'20€ = 2 CAÑAS! Por si fuera poco sólo aceptaban metálico... Menudo negocio tienen montado!
Nos pareció un lugar donde claramente engañaban a los pobres turistas con unos precios de escándalo!

Por si fuera poca la aventura surrealista, estaban muy concienciados de las medidas anti covid. Ésto nos pareció muy bien, pero cuando vimos el sin sentido de las medidas ... Los camareros con la mascarilla bajada, pero con guantes sin desinfectar, claro... Eso si, no te quedes mucho tiempo guardando la cartera en la barra ni preguntando el porqué de esos precios, porque estarás interrumpiendo la "zona segura"...

Una pena llevarnos este recuerdo con lo bonito que es Burgos.

Nos sentamos por el cartel de la fachada con las tapas, raciones... Y cuando fuimos a pedir solo nos podían ofrecer las tapas que quedaban en barra y calamares.
Anunciaban también bocatas, la mesa de al lado pidió dos y solo tenían pan para uno y medio....

Estuve hace 1 semana y vaya espectáculo el camarero un señor ya mayor de muy mal humor, yo decía a éste le da un infarto y la señora que servía las terrazas estaba aguantando las voces del susodicho. Gracias tenían que dar de tener gente haciendo gasto. Y si preguntas algo el señor muy desagradable, mejor que se jubile.

Sitio sucio y viejo, en el baño mejor no entrar, camarera no muy amable y precios abusivos: 4€ café sólo con hielo y bayleys. No vuelvo y no lo recomiendo!

Pintxo de tortilla pequeño y pan duro no, super duro. De esta forma no recomendaría este local para desayunar.