El 87

Deplorable es poco para describir la experiencia en este sitio. Menú del día por 16€ en la plaza Mayor de Soria, la terraza y el bar llenos de gente, no pintaba mal. Pues pintó. Comenzando por la camarera del salón, que solo tenía 4 mesas que atender, y que no podía hacerlo con más desgana, más descaro y lanzando los platos a la mesa. Le pedimos vino blanco y nos planta una botella de tinto. Se lo hacemos ver y nos dice que el blanco no entra en el menú y que se cobra aparte. Podría haberlo dicho al pedírselo, no? Sobre la comida. De primero, revuelto de setas y gambas. Gambas, contamos 1. El revuelto, insulso, aguado, insípido y las setas durísimas. Debe de ser difícil hacerlo tan mal. De segundo, manitas en salsa. Imposibles de comer por la capa de pimienta que les echaron encima. De postre, cuajada. Pregunta la camarera si la quiero con miel, le digo que no y en la foto se puede observar por dónde se pasó la respuesta. Y todo ello aderezado con el olor a fritanga del bar ya que la cocina es interior y la puerta da al comedor. En fin, desastroso.

Estupendo en la Plaza Mayor. Lo mejor el precio comida y trato. Es comida más de diaria pero muy bien y genial de precio.

Pésimo, tomamos unos cervezas antes, después de volver por recomendación por gente de Soria, las camarera nos lío con las botellas del vino del menú pregúntamos una y mil veces ya k teníamos 4 menús y nos dijo k nos entraban 4 por menú, después se informó y resultó que no, la mesa de al lado que era una pareja de señores mayores al ver el lío k nos tenían cuando se fue que terminaron de comer nos regalaron su vino del menú y al pasar el rato nos vino el que parecía el dueño del restaurante diciendo que no podíamos ROBAR VINO DE LA NEVERA, cuando en ningún momento lo hicimos y estaba la demás gente de otras mesas de testigo, yo trabajo igual que ellos en la hostelería y para hacer esa acusación hay que tener pruebas, solo que al ver dos botellas( unas que nos regalaron los señores) pensaron que las robamos de la nevera... penoso el servicio y el trato no lo recomiendo teníamos una perspectiva muy alta y nos hemos quedado en no.volver aquí.

Tapas ok, buen menú a buen precio y buena atención. Solo desearía que dejasen comer el menú fuera en la terraza.

Fuimos a comer dos adultos con dos perros en la terraza de este restaurante. Comimos un menú, entrante, primer plato, segundo plato y postre por 17€. La comida no estaba mala pero tampoco era excelente. Las raciones eran pequeñísimas.
Por otro lado la camarera era excelente, estaba ella sola para atender la barra, las mesas de dentro y las mesas de fuera. En ningún momento perdió la profesionalidad y la buena atención, por ella podríamos poner 5 estrellas.
Respuesta al propietario. Fue la chica la que nos dijo que Estaba sola atendiendo comedor interior, exterior y barra. Pero si no vuelvo jamás a este restaurante, será por la mala educación del propietario.

Mi experiencia es en el bocadillo Chut,
Fabuloso, impresionante, Con mucho relleno muy jugoso y muy sabroso.
Lo recomiendo.

Las pulguitas o molletes estaban buenos, por 1,50€ bien. Pero el trato en terraza con la camarera ha sido pésimo, no miraba a la cara ni preguntaba cuando ibas a pedir, solo se quedaba quieta mirando a la libreta y luego ponía mala cara, dan ganas de irse. Puede ser que fuera un mal día pero hemos tenido una muy mala experiencia.

Lentitud en cocina deplorable. La calidad y cantidad de los platos, discutible, cuando menos.
El camarero voluntarioso y es lo único que se puede salvar de la experiencia. Desde luego, 3 horas (de reloj) para 4 menús del día no hay quien se lo explique.