Bar Piscina Aldehuela

Para ser el único bar/restaurante que hay dentro de las piscinas, y en el único sitio que puedes pedir algo para picar e incluso tomar algo, la atención en este lugar es pésima.
Van dos veces que repetimos y la primera pensamos que un mal día lo tiene cualquiera pero la segunda nos hemos dado cuenta que realmente es la atención que te ofrecen.
Un sitio para no darles un euro más y si quieres comer o beber algo te sales a las carpas de fuera del recinto y lo vas a disfrutar más.

Le doy una estrella por que no se puede dar 0 . Hemos ido varias veces la primera pensábamos que un mal día lo tiene cualquiera pero ha ido empeorando hasta que hoy estamos sentadas media hora y atienden gente que vino detrás antes … tengo que ir a decirle que nos atiendan y la sorpresa es que después de eso llega la señorita que sirve dando golpes en la mesa con la bebida y con muy malas formas … muy decepcionante … de lo peor que he visto en hostelería … y para mas inri pedimos un bocadillo con lechuga y la traen podrida … para no volver …

Por 5,50€ tienes un bocadillo tamaño baguette y unas patatas fritas. Además ofrecen diferentes platos combinado o hamburguesas. Buen precio y buena atención.

Calidad precio fenomenal, trato super exquisito, muy profesionales y muy agradables, e igualmente mucha higiene.

Atención pésima . No volveré a ese bar si voy a la piscina ya me llevaré yo mi comida y bebida .

Ayer nos dijeron que no tenían cubitos de hielo para el vino con gaseosa. ¡Al señor de la mesa contigua le sirvieron café con hielo!. No pudimos pagar con tarjeta porque según la camarera "está estropeado" ; según la señora de la barra "todavía no lo han traído". ¡En estos tiempos de pandemia, pagando en efectivo!

Ayer tuvimos una mala experiencia en el bar de la piscina. Tardaron más de una hora en servirnos y eso que llegamos pronto y que pedimos el menú del día. Menos mal que los niños pudieron comer croquetas (muy ricas por cierto) y patatas. Pero nosotros 6 adultos tuvimos que ver como servían otras mesas que habían entrado después antes que a nosotros. Parece que en la cocina había un importante descontrol. Lo único que se salvó fue la pobre camarera a la que se le caía la cara de vergüenza y no paraba de pedir disculpas. Fue muy amable. Volveremos a la piscina pero no al bar seguro

Muy mal atendido. Y muy caro con respecto al año pasado