Bar Don Quijote

Fácil aparcamiento.
Se come muy bien. Todo muy rico, el bacalao y el solomillo al ajo tostado, las ensaladas... También hay arroz con marisco en puchero de barro que hay que llamar previamente.
Se puede reservar sobretodo los días de fiesta.
Amplia terraza interior y en la calle.

Desde don Quijote queremos aclarar el comentario de Alejandra. En ningún momento especificaron qué tipo de embutidos querían, se le explicaron los embutidos con los que contábamos y accedieron sin poner ningún problema y con respecto al arroz, desde el primer momento se explica su precio por persona,dicho precio consta en nuestra carta y también accedieron.

Bastante bien. Café con leche y tostada de un pan muy rico con "mantequilla" (venía untada de cocina, y sería margarina, bastante buena) y mermelada. 2,3€

La verdad que la comida muy buena,las unicas pegas que tendria serian que tardan mucho en la comida por que casi siempre esta el bar hasta la bola y la segunda seria que solamente por el hecho de ser un adolescente tardan mas en atenderte,a los adultos sin ninguna razon le atienden y le ponen la comida,bebida etc... Antes y el personal muy majo lo unico que el gefe mario a veces no se le entiende muy bien por que habla en portuges.

Venimos con la idea de ver la recreación de la famosa batalla y paramos a comer,la señorita camarera nos pregunta si tenemos reserva a lo que contestamos que no,nos dice que nos limpia una mesa que había quedado vacía y que podemos ocuparla.
Hasta aquí todo normal,pedimos unos platos combinados (pues al ser fiesta allí y siendo su día de descanso había artículos de carta que no estaban disponibles) concretamente son las 14:52 cuando pedimos,nos trae la bebida(las cervezas no bajaban de 10° de temperatura) a las 15:40 nos dice que enseguida sale lo nuestro,pedimos más bebida(igual de caliente que las anteriores)y a las 16:00 al pedir la tercera ronda de bebida y recriminarle la excesiva tardanza, me dice que yo tenía que haber preguntado si iba a tardar mucho la cocina (comunicándole yo que era su obligación advertir al cliente sobre la tardanza excesiva para que este decida si espera o se marcha) nos dijo de nuevo que ya salía y a las 16:14 cuando porfin viene la comida el gerente del establecimiento hablando en portugués y de muy malos modos nos dice que la cocina ha tardado porque hay dos personas trabajando solo a lo que le digo que por educación lo menos que se hace por profesionalidad es avisar al cliente de la tardanza. LA COMIDA ESTABA BUENA (menos mal que algo se salva) .

Excelente: la ubicación, con una terraza grandísima; la atención de Mario y la comida. Estaba todo buenísimo, las carnes de 10. Sin duda, repetiré

Un bar tranquilo, buen ambiente, buenas raciones, buenos bocadillos, buenas hamburguesas, precios asequibles

Iba de Viaje y me pare. A la última hora me atendieron como en casa, excelente servicio