Bar Ribeira Sacra

Hemos comido estupendamente. No hacen menú, solo platos, pero todo muy bueno. Nos han atendido muy bien. El precio muy bien. Hemos salido contentos.

Me ha encantado la visita guiada! Pilar un lujo. La cata de diez.

En pleno centro de Sober, nos encontramos con este Bar y su amplia terraza.
Lo primero que sorprende al llegar es la distancia con que atienden, rozando casi la frialdad.
Después de tomar la última mesa disponible, tardaron más de 20 minutos en venir a tomar nota. Las raciones disponibles te las cantan ellos en cuanto viene el camarero, y obviamente, sin decir el precio de cada una ellas.
Nosotros tomamos, además de una caña, una ración de carrillera de cerdo, que eso sí, estaba buenísima.
Con lo principal, que es la buena relación calidad-cantidad-precio de la comida, cumple, con todo, mejoraría mucho si tuviera una mejor, más rápida y más próxima atención al cliente.

Comida riquísima. Raciones generosas. Pedimos gambones al ajillo, croquetas y costilla asada para dos y no pudimos acabarlo. Precio muy contenido.

Todo delicioso y el servicio muy rápido. Además el lugar es muy tranquilo. En pleno corazón de la Ribeira Sacra.

Nos recomendaros sus pizzas y la verdad es que estaban riquísimas, no podemos poner ni una pega a la comida 😍😍. ¡Están de 10!( Adjuntamos foto de la pizza Sistin.

A los dueños se les ve muy muy trabajadores, pero tambien se nota que van un poco agobiados con tantos pedidos y mesas.

Lo único malo es que tienes que saber que vas a querer pizza el día anterior o por la mañana, si no no te las hacen.

En en el bar nos tomamos el día anterior una cerveza , queríamos tomar otra cerveza y un pincho, pero tardaron mucho en venir a atendendernos de nuevo, como 30 min, y nos fuimos, ya que teníamos una reserva.

Nunca he comido un salpicón de marisco sin marisco,hecho con sobras de pescado,2 gambas que no sabían nada bien y aceitoso,y no te dan cuenta especificando lo que vale cada cosa,o sea que te cobran lo que les da la gana

Fuimos a tomarnos una caña y nos atendieron FATAL. Además de que no nos pusieron el pincho (al resto del bar si), primero nos dijeron un precio y al volver de sacar dinero porque no teníamos efectivo nos dijeron otro (mas algo por supuesto). Malas caras y malas formas por parte del camarero, muy maleducado.