Bar jubilados

Buen sitio para un almuerzo valenciano a media mañana con vistas al castillo (hoy ayuntamiento). Variedad de rellenos a la vista en las vitrinas para bocadillos con buen pan. Acompañados de aceitunas y cacahuetes “del collaret”, como debe ser, bebida y café. Cremaet muy bueno para mi gusto (dulce sin empalagar y con el justo toque de corteza de limón). Dos bocatas (uno entero y uno medio), vino con gaseosa, cortado y cremaet 10€. Para repetir.

Dije repetir hace dos meses y repito hoy 26 de Febrero de 2022. Sábado hora de esmorzaret (10:30) y todo a rebosar aunque solo hemos esperado 5 minutos para tener mesa. Sin problemas para ordenar los bocadillos y tenerlos en la mesa; algo más lento al pedir el café. Vale mi comentario anterior en general y además decir que una de calamares que hemos pedido estaban muy bien rebozados (añado foto)

Almuerzo de proximidad de categoría!!

Una terraza enorme y todo buenísimo. El pan del día y natural. Lo recomiendo!

Magnifica atención, buenos precios y muy buena cocina

Fuimos el pasado sábado. Reserva a las 21:00 y a las 20:55 estábamos sentados. A las 21.15 nos tomaron nota de las bebidas. A las 21:30 nos tomaron nota de lo que queríamos sin habernos dado antes ni una carta ni una indicación, ni código bidi ni nada. Las primeras bravas, llegaron a las 21:45 y los bocadillos, a las 22:15. Un autentico despropósito. Las bravas estaban ligeramente crudas pero los calamares, aunque el producto era de calidad (calamar y rebozado), estaba un poco crudos y además fríos. Los bocadillos fríos y cuando llegaron ya habíamos hecho la digestión. Los chivitos con el lomo frio y duro. Todo de buena calidad y bien cocinado pero llego tarde, absurdamente tarde. Muchísimo descontrol en general por lo que no creo que volvamos y es una pena porque con un poco organización es un sitio que merece la pena. La comida es de calidad y el precio buenísimo.

Buen servicio,buena atención,un trato excelente,lo recomiendo,me encanta.

El sitio está en un lugar ideal para ir con niños, la calidad de la comida es buena y el trato amable, pero el servicio es desesperantemente lento. Falta un buen camarero.

Tienen a una única persona haciendo todo y pretenden que funcione así, ganar mucho y contratar lo mínimo pues no merece la pena ir, que los camareros no son esclavos

Lugar apacible para almorzar,cenar buen servicio y precios asequibles