Castillo de quintos

El sitio esta muy bien. Tiene muy buenos precios y ofertas para picar algo y beber que son geniales. El trato también es bueno. El lugar esta algo deteriorado pero hay buen ambiente. Una opción perfecta para salir con amigos.

Aver es un sitio económico pero nada más

La cerveza es bastante barata, pero los precios y las ofertas pueden variar de un día para otro, siempre está la incertidumbre. La higiene escasea, el trato no es el más amable, y no es un lugar precisamente bonito. Aún así, creo que pagar 1.20€ por un tanque (si es que es eso lo que cuesta cuando vayas) de vez en cuando compensa en parte el resto de factores.

Local un poco guarro propio de un pais del tercer mundo. La atención al cliente deja que desear. No atienden en mesa has de ir tu y pedir en barra. El sitio es para echarse unas cervezas y poco más aunque hay una oferta de bravas más jarra 1L de cerveza que por 5€ está muy bien. Ambiente universitario y algún camionero que va a ponerse un poco tajado.

Jarra de cerveza más tapa x 2 euros. La tapa Increíble, riquísimas. Lo que ha mejorado este local con el nuevo camarero/cocinero. No lo cambiéis, he venido antes y lo digo x experiencia. Lo mejor que habéis tenido en 3 años que conozco este local. Han incorporado a la carta hamburguesas, hamburguesa más jarra x 4,50, buenísimas. Eso sí, mejorad el local por favor.

Típico barrio de bar.

+ Buenos precios.
- La tele a todo volumen
- Gran parte de la clientela no es muy 'deseable'

En resumen: un bar que molesta mucho a los vecinos.

Un saludo a tod@s.

Baños muy sucios, ni una triste tapa, la camarera es extranjera y no te entiende bien cuando preguntas por cualquier cosa. Un bar para tomar una cerveza si has tenido la mala suerte de topartelo y buscar algo mejor.

El peor almuerzo de mi vida: Un bocata incomestible de embutido atrasado, frío y medio crudo, nada de aceitunas o cacaos o lo que fuera. Un carajillo impresentable que se ha quedado entero en la mesa. Y para rematar me cobran 6'50 €. Sin duda no volveré. Le pongo una estrella porque no hay menos porque ni siquiera la Coca-Cola estaba apetecible por el estado del vaso.