Bar Pons

Un sábado noche, con mucha gente en todos los restaurantes, en general quieren llegar a todo , de cualquier manera, deben pensar que todos somos guiris o algo así.
La atención de la camarera buena, a pesar de la lentitud y de tanta gente para atender.
La comida pésima, Mejillones al vapor recalentados y demasiado hechos ( con los pocos minutos que cuesta de hacer), boquerones muy fritos y duros , el pulpo encebollado bueno..
Tenía buenas referencias, pero parece ser que en verano se les va de las manos con tanta clientela.

Conozco este lugar de toda la vida ,han sido muchas veces de ir a tomar algo, sobretodo unos carajillos espectaculares. Hoy hemos ido q tomar carajillo que iría seguido de copa, después de pedir en barra y una mesa libre de dos a casi las11 de la noche el dueño de repente dice que el carajillo en barra, cuando la terraza estaba prácticamente vacía. No volveré ni lo aconsejare a nadie sino todo lo contrario.

Llegamos con mesa reservada para 7 en el interior del local, después de llamar con varios días de antelación, incluso llegando a llamar dos veces más durante esos días para cambiar el número de comensales y que no les provocaramos ningún contratiempo, y no tenemos sitio, porque como hoy hace aire la gente de la terraza "se ha ido quejando y queriendo ponerse dentro"
El mal trato y chulería del camarero y las risas de las camareras (ya nos diréis de qué os reíais)
Muchas gracias por el detalle, nos hemos ido a otro sitio a cenar, será por sitios en Benicasim, muy bien atendidos en el otro sitio (Nou Café)
Por supuesto no pensamos volver ni recomendarlo a nadie

Un buen sitio para oara reunirse y tomar unas tapas y unas cervezas.

Todo muy bien, servicio rápido y precios de bolsillo.

Me cobraron 6€ por un bocadillo pequeño de tortilla con tomate. Y otros 6€ por un bocadillo pequeño con dos trocitos de bacon con dos quesitos de loncha y sin calentar. Si fuera medio bocata y bastante elaborado con más ingredientes aún pero, ¿Estamos locos? ¿En un bar de pueblo? Flipadísimos. En fin, solía venir con grupos grandes de personas los fines de semana, pero ya no vuelvo más. Que decepción.

Comida muy buena y te los sirven rápido y

Bar familiar, precios asequibles.
Tanto el propietario y el personal atento y educado.
Comida casera y platos abundantes.