Albergue municipal

El albergue no está mal. Es pequeño, en una habitación hay 8 camas. La hospitalera Monica muy maja. Hay lavadora y secadora que cuesta dos euros. En la cocina hay comida que los peregrinos dejan como galletas, pan, café etc. Lo peor es el colchón que es muy malo y la litera que no tiene estabilidad. Por lo demás lo recomiendo 💃🏻

El sitio es muy tranquilo. Con lavadora y secadora (2€ cada uno), imprescindible para una etapa del Camino Primitivo en invierno.
La hospitelera muy muy agradable. Hasta nos avisó de un bar justo enfrente para poder ver el España - Alemania del mundial.

Un sitio normal limpio donde descansar tras el camino, es un como un local comercial convertido en albergue, no es muy atractivo pero tras la paliza de la etapa es genial para el descanso!
La hospitalera es majisima y encantadora. Total confianza

Pequeño albergue con todo lo necesario para descansar. Hospitalera muy agradable

Tiene una hospitaleras que mimá él albergue y a los que hacemos él camino. El albergue esta nuevo y limpio.

Pequeño pero acogedor.
Lavadora y secadora.
La hospitalera encantadora!!!!

Una hospitalera muy atenta y amable. El albergue es pequeño, muy limpio y con todo lo que puedas necesitar. Una experiencia muy buena, sin duda

Un sitio muy limpio, ordenado, te ofrecen hasta comida y no falta de nada. Y Mónica, la hospitalera que lo lleva es un encanto, te da consejos sobre el Camino y esta siempre dispuesta a ayudar con una sonrisa.