Albergue Las Herrerías - Miriam

Me parece un sitio muy acogedor, con todo lo necesario dentro de lo que es un albergue. Las chicas que te atienden son encantadoras y te atienden de manera muy amable ,explicándote todo.
Puedes llevar tú comida sin problema alguno .
Me pareció muy buena relación calidad /precio. Sin perder de vista de que hablamos de un albergue,no de un hotel de 5 estrellas.
Sin duda repetiria

Sin duda repetiría.

Un albergue precioso, limpio y reconstruido con mucho amor. La relación precio-calidad es muy buena, el dormitorio muy cómodo y tienen todo lo necesario para el buen descanso del peregrino. El precio de la cama incluye el desayuno y es opcional la cena de menú vegetariano que está muy bien! ❤

Es un albergue muy acogedor, en la recepción me atendieron muy amablemente, las voluntarias me explicaron todas las condiciones. La cena es vegetariana y casera. Además, cuenta con jardín, hamacas y biblioteca. El precio de la cama son 7€ y para el precio, ofrece muchos servicios. Sin lugar a dudas, lo recomiendo.

El trato de Miriam muy amable y atenta, la cena riquísima. La habitación super bonita y coquetona y tuvimos la gran suerte de tener baño en la propia habitación, un lujo siendo un Albergue. Recomendable 100%

Sitio incómodo con las literas en planta alta y el baño (1 solo) abajo y muy sucio. La hospitalera vegetariana que pretende imponer su vegetarianismo criticando duramente a quienes no lo son. Mal servicio prestado x voluntarios que no tienen idea de la cordialidad. Hay otro enfrente excelente. Muy caro relación calidad/precio. NO LO RECOMIENDO!! VAYAN A OTRO! HAY DOS MAS EXCELENTES!

Miriam albergue, es un lugar muy lindo con mucha naturaleza y cosas hechas a mano que dan un ambiente bastante rústico y hermoso en medio de Las Herrerias, es muy limpio y ordenado, la cena que brindan es muy rica y refrescante.
Es muy recomendable pasar una noche y probar de su cena en el comedor con todos los peregrinos ❤️

Albergue maravilloso de larga trayectoria. No soy vegetariana pero por la cena tan buena y casera que me han dado podría serlo. Los voluntarios han sido encantadores y el jardín para descansar un oasis en el camino.

Buena atención del personal. Lugar idílico y menú delicioso. Gran opción al pié de una de las atapas más exigentes del Camino de Santiago. Un acierto seguro!!!