Albergue Camino de Santovenia

Íbamos en bicicleta y la dueña nos atendió de forma muy simpática y amable nos dio de comer. Pedimos lasaña casera que estaba realmente buena! Un lugar muy muy aconsejable. La dueña es una chica muy alegre y que transmite muy buenas vibraciones

Sitio muy recomendable, además de un servicio excelente, son muy agradables y volcados con los peregrinos, todo son facilidades y buenos consejos. Cenamos estupendamente, y el agua del manantial, brutal. Y lo mas importante, el camino por esta via, ademas de ser el camino antiguo, es mucho más llano y transitable que el de Atapuerca, sin duda la mejor opción. No os lo perdais

Muy buena experiencia en Santovenia de la Oca. Elena muy amable y atenta. El albergue limpio, nuevo y con bar. Los baños perfectos. Lugar muy tranquilo y con un pilón al lado para refrescar las piernas tras la etapa. Ese agua cura cualquier mal. Es por donde pasa el camino originalmente (siguiendo el río, como llevamos haciendo desde St. Jean). Vine desde Belorado siguiendo el camino y justo cuando ves San Juan Ortega te metes por el camino de la izquierda, bordeando por las casitas del pueblo y llegando a una nacional (muy poco transitada) que te lleva a Santovenia (yo fui siguiendo Google Maps y no tuve ningún problema).
Quien sepa algo de historia del camino sabrá que las ''ocas" nos van acompañando y ofreciendo sitio seguro. Desde aquí puedes llegar a Burgos (20km) dirección Ibeas de Juarros sin grandes desniveles y con buenas partes de sombra y bonito paisaje.
Lo recomiendo sin duda ❤

Albergue situado en Santovenia de Oca,donde no hay ni un solo bar ni tienda o supermercado donde comprar.Regentado por Elena,a la que le importa poco o nada el peregrino.Atención mediocre y todo muy caro.Por poner una lavadora te pide 10€.Su respuesta es que la luz está muy cara.Menú por 14€ muy básico y con comidas precocinadas.Al pagarle el menú del mediodia,me sugirió que le dejase pagado el menú de la cena,reservándole el primer plato(arroz a la cubana).Y para mi sorpresa,al sentarme en la mesa para cenar el arroz que le habia reservado,me dice que lo habia vendido y que eligiese otro plato.Al percibir mi descontento,fue cuando me dijo,de malagana,que me hacia arroz.Al parecer,le suponía un esfuerzo titánico cocinar un poco de arroz blanco.
Lo único positivo a destacar es que está limpio.
No me sorprende que el albergue esté vacio.Lo desaconsejo 100%.

Muy buena atención por parte de Elena, desde el primer día que contacté con ella me ayudó mucho con dudas que tenía.

Puede que llegues a la hora acordada y que esté cerrado.
Para dormir no llegues más tarde que las 10 que igual duermes fuera.

Como en casa. Elena es encantadora y la comida casera. Cenamos berenjenas rellenas, pollo en salsa ....muy sabroso. El albergue está súper limpio y nuevo. Tienen sitio también para guardar las bicis. Más no se puede pedir. Gracias.

Albergue muy bueno, comida bien condimentada y exquisita, trato inmejorable y cercano a cargo de Elena, que es la cocinera y la encargada del albergue.
Si hacéis el Camino de Santiago, no os lo podéis perder.
Seguro que repetiréis y lo aconsejaréis a vuestros conocidos, tal como estoy haciendo yo.