Casas Rurales La Ondina del Madrigal

Hemos pasado este fin de semana en la casa 2 y tengo que decir que la casa es acogedora, estaba muy limpia, y no echamos en falta ningún utensilio.
Cuando llegamos en plena ola de calor la casa estaba fresca y tenia aire acondicionado y ventilador, lo cual nos vino muy bien .
Por la mañana desayunamos en el porche y cenamos, aunque no se puede usar la barbacoa tienen una plancha eléctrica que sacamos a la calle con alargador para hacer la carne y que no oliera dentro de la casa.
La piscina no es muy grande pero suficiente para darnos un chapuzón a cualquier hora ya que no hay horario. El agua está limpia ya que por la mañana temprano van limpiarlo.
No estaban todas las casas ocupadas, así es que estuvimos muy tranquilos sin ruidos por la noche, ni aglomeraciones en el recinto.
El pueblo es bonito, con muchas cuestas y calles estrechas. Mejor dejar el coche en las casas y dando un paseo puedes recorrerlo.
Lo mejor sin duda es la piscina natural. Se puede subir con el coche en 5 minutos o andando. La carretera es estrecha y hay que subir pronto para poder aparcar bien.
Allí hay bares para comer .
El gua estaba muy limpia y la zona de baño también. Por la mañana había un señor recogiendo basura y cambiando las papeleras. Desde luego el sitio es una maravilla para pasar el día y bañarse sin problema. Es accesible para ir con niñ@s, además tienen columpios también.

Volveremos seguro a La Ondina de Madrigal .

Tengo la suerte de disfrutar de este magnífico lugar con mi familia desde hace ya 10 años. Las casas resultan muy acogedoras y el entorno, una maravilla. De fácil acceso, cuenta en nuestra opinión con una piscina estupenda y el jardín es más que suficiente para hacer vida en él;desayuno, merienda y cena ,con unas vistas inmejorables y un cielo que, por la noche, te recuerda que te encuentras en un lugar especial.

Son varias las casas así que yo voy a hablar de la Casa 2 que es en la que hemos estado alojadas.
Aunque avisamos de nuestra hora de llegada y fuimos puntuales, al llegar tuvimos que esperar a que terminasen de limpiar. Llegó una mujer a recibirnos que simplemente nos dijo que firmásemos un papel y le diéramos el dinero que faltaba. No nos informó de cosas básicas como dónde estaba la piscina, el horario de la misma, luz del porche o que no dejásemos cosas en el porche porque nos las mojarían los aspersores. Mal recibimiento.
El porche es minúsculo y los muebles de jardín son una mesa y 4 sillas de plástico incómodas. Ya que no te corresponde zona de césped, lo mínimo algún detalle en el mobiliario.
La piscina es muy pequeña y se hace aún más pequeña en tiempo de covid.
Por lo demás, la zona es muy bonita y la piscina natural que está al lado está muy bien montada.
El restaurante de al lado tiene una terraza grande y fueron muy amables.
Cenamos en otro restaurante detrás de la escuela infantil y todo genial.

Un pueblo tranquilo, rodeado de valles y tranquilos pueblos extremeños. Muy cerca de la autovía. Las vistas son espectaculares. Hay cerca piscinas naturales y muchas rutas para la practica de senderismo.
Las casas son muy coquetas, tienen de todo y están muy limpias. Hay aire acondicionado, lavadora, lavavajillas, microondas, secador...
Es todo un lujo poder desayunar y comer a la sombra de los frutales. También disponen de una pequeña piscina para darse un chapuzón. Nosotros repetiríamos sin dudarlo. Muy buen precio.
Volvemos en los Santos. Ya estamos deseando ir. En otoño el paisaje es precioso.

La casa estaba muy limpia, con chimenea y barbacoa,un pequeño césped delantero que le ha venido fenomenal a la perra. La. Zona espectacular con mucha naturaleza y pueblos para visitar

Recomiendo este lugar 100%, porque son unas casitas que parecen de cuento, limpias y cuidadas, por la relación calidad-precio, por un entorno maravilloso desde el que hacer excursiones. Recomendable para unas vacaciones en familia o con amigos y para una escapada de la gran ciudad. El trato ha sido inmejorable. Volveré seguro

Me ha encantado. Me he sentido obligada a compartir mi experiencia porque deseo que otros la disfruten como yo. Soy de Logroño y fui con mi pareja para desconectar un par de días y no podríamos haber escogido mejor alojamiento. El paisaje precioso, perfecto para la desconexión y la tranquilidad. Las instalaciones inmejorables, todo el mobiliario en perfecto estado, destaca por su limpieza y comodidad. No me puedo olvidar de mencionar que además cuenta con una piscina ideal para refrescarse en verano. También decir que Pedro, el propietario, no podría ser más atento y simpático, consiguió que nuestra estancia fuera lo más placentera posible y nos ayudó a orientarnos por la zona, que por cierto es preciosa.

Un sitio genial. Las casas disponen de todas las comodidades (lavadora, lavavajillas, aire acondicionado, ...).
Hay una piscina pequeña, pero suficiente para darse un chapuzón.
Están a 5 km de la autovía por lo que están muy bien comunicadas con cualquier sitio de la comarca.
Cerca podemos ver la ciudad abandonada de Granadilla, las ruinas romanas de Caparra, Plasencia a 20 min al igual que Hervás.

Totalmente recomendable.