LEKUNE PINCHOS
C. de León XIII, NUMERO 1, 3, 50008 Zaragoza, España
4
434 reseñas
8 comentarios
J4W9+PR Zaragoza, España
Reportar ubicación
Reclama esta ubicación
Lunes: 8–23
Martes: 8–23
Miércoles: 8–23
Jueves: 8–23
Viernes: 8–23
Sábado: 10–23
Domingo: 10–17
Martes: 8–23
Miércoles: 8–23
Jueves: 8–23
Viernes: 8–23
Sábado: 10–23
Domingo: 10–17
La verdad es que estaba todo muy bueno aunque al final son pinchos y si quieres cenar bien te saldrá bastante caro.
El establecimiento funciona diferente a otros del mismo género. En este te van trayendo a la mesa diferentes tipos de pinchos cada vez. Luego tú eres el que eliges si te gusta y lo quieres o esperas a otra ronda por si te gusta alguno más. Una vez elegido el palillo que tiene lo conservas en un vaso y vas acumulando estos para el importe final. Hay dos tipos de palillos, unos largos y otros cortos. De ello depende el precio de cada pincho. Detallar que salen continuamente de cocina recién hechos.
El local es amplio y dispone de terraza. Muy bien decorado y acogedor. Los trabajadores brillan por su simpática y educación. Es la primera vez que iba y me trataron como si fuese allí toda la vida.
Los pinchos tienen una variedad increíble. A parte, hay muchos muy elaborados y con combinaciones exóticas. No son los típicos pinchos de bar. Puede ser que durante tu estancia no repitas pinchos de lo primero que te trajeron. De tamaño están bien, siendo unos más grandes que otros o más rellenos.
(En mis fotos puede ser que parezca que son croquetas y uno es de queso camembert con jamón ibérico, otro de pollo marinado con queso y bacon, etc).
Para finalizar disponen también de una serie de postres.
Por poner un punto negativo es que como suele suceder con los pinchos al final vas cogiendo y cogiendo, te llenas menos por el tamaño y sale una factura simpática. Para cuatro personas nos salió a unos 25€ por persona.
Van sacando pinchos por las mesas y si quieres coges, se echan los palillos a un vaso y luego se cuentan para pagar. Todos los pinchos que sacan son a 2'40 y los que probamos estaban muy ricos.
Eso sí, preguntad precio de bebidas y tener en cuenta los pinchos que cogéis que luego hay gente que se asusta con la cuenta.
agradable, muy diferente de lo normal. Los pinchos cada día mejores. Lo que no es de recibo es el precio de las bebidas; carísimas. Tampoco disponen de carta de vinos, y aunque pidas los precios para orientarte, después te cobran por una botella lo que quieren. Esta parte la deben de cuidar más si no quieren molestar o enfadar a los clientes. Dudo, además, que no sea obligatorio disponer de una carta de precios.
Para empezar la decoración está muy bien y sobretodo es muy cómodo sin importar donde te sientes.
La comida muy buena toda la que he probado. Y lo mejor, con producto de proximidad siempre que es posible y con muy muy buena calidad. Yo probé unas lentejas que estaban de vicio.
Y por último la atención también esta por encima de la media, y eso se agradece mucho.