Las Bodegas de Ainsa

Elegí la especialidad de la casa, que consistía en una variedad de carnes a la brasa (ternasco, longaniza, churrasco...), acompañada de una ensalada variada, con un bol de tomate rosa de la zona y unas patatas panaderas!! Estaba increíble, comen de sobra dos personas y nos costó 30€, bebidas aparte. Estaba todo increíble y el trato inmejorable!!!

Acabamos de comer 6 personas, hemos pedido dos parrilladas, a pesar de tener problemas de personal, nos han atendido muy bien, camarero rápido, amable, eficiente..las parrilladas perfectas, el tomate de vicio, postres y cafés, en una terraza que casi no nos vamos de aquí! Al estar en plena plaza pensaba que igual era más malo o más caro pero qué va, muy bien en todos los sentidos! Repetiría sin duda, altamente recomendable!

Que pena de restaurante, habiamos comido y cenado genial cuando eran las bodegas de Sobrarbe, pero en esta ocasión salimos muy disgustados.
Lo tiene todo para triunfar, esta situado en plena plaza Mayor de Ainsa, uno de los pueblos más bonitos de España, y tanto el local como las terrazas son fabulosos.
La comida no es mala, no voy a decir algo q no es, pero es cara para la cantidad y el servicio es pésimo.
Detallo la experiencia de 15 personas (3 eran niños) con reserva a las 22 h. Nos sentamos, se nos repartireron las cartas y a los 10 min nos tomaban nota. Ya nos advierte q pidamos todo lo q nos haga falta ya q va a cerrar cocina..... Un sabado de agosto, en Ainsa y con un local enorme..... Creo q han elegido mal el oficio🤔
A la hora de pedir los cafes, nos echaron a la terraza exterior, para recoger en la q cenamos. Nos trajo los cafes en una bandeja q dejaron en una esquina y salio corriendo.
Eso si para cobrarnos 433 € no hubo problemas. Ver detalle precio de 2 cestillos de pan, al q hay q sumar IVA🙄

Disponen de una terraza bastante grande situada en la plaza Mayor. Nos sentamos para tomar algo, tardaron muchisimo tiempo en tomar nota.

Conocíamos este restaurante de hace años, con sus anteriores propietarios. Tenían una carta excelente a un precio adecuado. Ahora se ha convertido en un despropósito. Muy caro y la cocina muy mediocre (siendo generosa). El camarero amable tirando a empalagoso.
Para nada recomendable.

No es la primera vez que vinimos, siempre que visitamos el pueblo pasamos por este restaurante.
El servicio es eficaz y amable. La comida que se prepara es muy buena y típica del pirineo, en especial la carne, de hecho hay algunas como el solomillo que te la preparan en la misma mesa y así tú decides el punto que le quieres dar.
Os recomiendo, visitar la terraza ubicada detrás del restaurante donde puedes comer admirando las vistas que te rodean. Es algo parecido a un mirador.

Lugar de foto, menú de pena que NO INCLUYE VINO (ni iva) en una comarca vinícola. Sopa pasable, carne que venía fría de la brasa (¿perdona?) con patatas prefritas mas propias del McDonalds, arroz con leche mediocre. Eso si, atentos (no les queda otra).
Sitio para lucir selfies y comer muy mediocre. A evitar.

Restaurante con patio interior con mucho encanto. Camarero muy simpático. Comida espectacular (revuelto con huevo poché y setas muy bueno y la carne también) No te dejes llevar por las apariencias (en la terraza no suele haber mucha gente). Vale mucho la pena. Muy recomendable.