El Rincón de Juan

Tras llegar a Toledo en plena ola de calor, caminando por sus callejullas siempre buscando sobra y un sitio donde comer, por casualidad te encuentras en callejón sin salida El Rincón de Juan. Decidimos entrar y somos recibidos muy amablemente por la camarera. Decidimos quedarnos y tras seguir sus recomendaciones quedamos gratamente por la hamburguesa de ciervo, estaba especialmente buena de sabor, en su punto, súper sabrosa. El
coulant de mazapán estaba exquisito.
Sin duda en nuestra próxima visita a Toledo volveremos a comer allí, lo suficientemente cerca de todo y lo suficientemente lejos para comer tranquilos.
Y sobre todo volveremos por la calidad de la comida y la amabilidad y simpatía del personal.

Un pequeño local que encuentras de casualidad ya que está en una mini placeta y no tiene un gran cartel indicador.
Comida casera típica de la zona, que puedes disfrutar en la sala o en mesas con estufas en el exterior.
Variedad de cervezas y buenos vinos acompañados siempre por una trato excelente por parte de todo el personal.

Encontramos el sitio por casualidad porque está un poco escondido en una callejuela y nos ha encantado. La comida estaba muy buena y con buenas cantidades. Las croquetas de chuletón increíbles. Tiene terraza. Muy buena relación calidad-precio. La atención ha sido normal.

Una tasca escondida en pleno centro de la ciudad.
Tienen una carta muy reducida pero todo lo probado estaba muy muy bueno.
Voy a tener que ir más veces para poder valorarlo todo bien porque hasta ahora me he quedado con ganas de más!!! 😜
En la foto una hamburguesa de ciervo

Un sitio agradable, buen servicio, sabores de la tierra, recomendable si hay hueco entrar, vale la pena… gracias

5 estrellas me parecen pocas. Un 10 por cómo nos han atendido, un 10 por la comida. Cuando vuelva por Toledo sin duda vendré por aquí.

Al llegar nos dieron un espantón porque la cocina no abría hasta las 13:45. Como sólo faltaban unos 20 minutos y teníamos buenas referencias nos quedamos tomando algo y esperando. A las 14:00 todavía no había abierto la cocina. El personal actuaba como si no hubiera nadie esperando para almorzar. Finalmente nos fuimos decepcionados y sin comer.
No me gustó el ambiente de pasotismo y falta de profesionalidad hacia el cliente. Creo que en un entorno de trabajo el personal debe trabajar de forma distendida, pero no actuar y hablar como si los clientes estuvieran molestando.

He ido muuuchas veces a Toledo, y que sorpresa mas grata me llevé esta última vez descubriendo este sitio que ya va a estar en la lista de los favoritos.
Fuimos 4 adultos y un niño.
Nos encantó a todos, hasta el niño disfrutó de su pechuga empanada que se la comió toda para sorpresa de sus padres, no la probé por no quitarle un trocito, pero quien lo hizo me dijo que estaba super tierna.
En la comida de adultos, pues la ensalada abundante, era la de pimientos asados con ventresca, espectacular, pedimos también un plato de embutido iberico variado, un platito de carcamusas y carrillada de cerdo estofada, nos pusimos como kikos, jaja, y el servicio, cuando llegamos no habia nadie, pues supongo sería pronto , era la 1 , pero luego se llenó dentro y fuera( la terraza, jaja) y no tuvimos ningún problema de retraso en nada, ni comida ni repeticion de bebida ni nada.
Así que por nuestra parte , un 10 en todo.
Nos verán mas veces y desde luego super recomendado.