Braseria restaurant El Caliu

Excelente comida, abundante, deliciosa. Tienen menú infantil, variedad en postres. Ambiente familiar lindo. Buenos precios. Y una atención impecable del personal. Tiene una decoración rústica y platos catalanes. Baños limpios y cambiador para bebés. Lo recomendamos!

Parada obligatoria de almuerzo para moter@s, ciclistas y quien quiera carnes a la brasa con grandes torradas. Buen ambiente, según el día, puede estar a reventar, así que conviene llegar temprano. La atención es buena y el lugar vale la pena.

Un sitio 100% recomendable, comida con mucha variedad con sabor 10/10.
Nos hemos difrutado junto a mi familia del menu del dia y unos calsots de temporada😋😋.
Los dueños y los camareros muy atentos y cuidan del minimo detalle

El restaurante no está mal. Para ir a comer esta genial. Lo único que nos tardaron muchísimo en tomar kota de bebidas y comida y tardaron muchísimo en servir y no había tantas mesas para q no pudiesen hacerlo en menos tiempo.
La comida pese a que tardaron estaba buenísima

Se come muy bien. Las Paellas son abundantes. Muy buen trato sobre todo por parte de Yene(disculpas si no se escribe así). Siempre tiene una sonrisa en la cara además de ser muy atenta y eficiente.
La crema catalana espectacular.
Gracias!

Camareras super amables, un sitio con bastante espacio estaba lleno el día que fuimos pero no con aglomeración. El menu de finde con entrada para picar estaba genial. Se come muy bien. Mi segundo fue un entrecot y estaba maravilloso pero de mi pareja era churrasco y no si podia comer. Parecía un chicle. El menu de niño genial también. Mi hijo ha eligido espaguetis boloñesa. Pero fuera eso todo lo demás perfecto. Desde el pan hasta el postre. Creo que solo él no tuvo suerte con el trozo de Chirrasco que le tocó.

El Caliu aunque han pasado muchos años sigue dando un excelente servicio, buenos menús con carne a la brasa, buen servicio y buenos precios, repetiremos.
Edito la reseña para decir en contra de lo que digo anteriormente, que con el paso del tiempo y desde que pusieron el restaurante en Castellar y se fue el dueño y cocinero, la calidad a bajado bastante, vale que el menú es barato 12€ pero ya no es lo que era. Sintiéndolo mucho porque era un buen sitio, no volveremos. Pedimos de primero arroz con bogavante y ensalada, el arroz con bogavante tenía eso el nombre de bogavante un trozo de cáscara, el plato rebosando y derramandose, la ensalada de queso de cabra con una capa exagerada de vinagre de Modena por encima, la lechuga y el tomate muy pasados y mustios. De segundo pedimos conejo y pollo a la brasa, incomible, la carne recocida y algo requemada acompañada de unas patatas panaderas reseca y de postre pedimos mató con miel, se podía comer pero de muy baja calidad. Acabo diciendo que las mesas tienen una especie de hule en el que te quedas pegado, si que hay algo positivo y es la simpatía del personal, aunque solo una camarera llevaba la mascarilla bien puesta. Salimos de allí con el estómago revuelto y seguro que no volveremos más.

Excelente la comida y en abundancia. Sitio de 10