Budiño de Serraseca

Un excelente y maravilloso espacio donde desconectar del bullicio y fundirse con la naturaleza. Su dueño muy amable, las habitaciones muy limpias y los desayunos deliciosos. Además, cerca de lugares hermosos para descubrir. Totalmente recomendable.

Alojamiento rural en ubicación idílica, tranquila y agradable. Ideal para desconectar de la ciudad. Habitaciones amplias y limpias. Cama grande y cómoda. Servicio amable y atento. Muy buena experiencia

El hotel está en un rinconcito súper bonito, en plena naturaleza, tranquilo, para desconectar y pasar unos días disfrutando de la zona. El desayuno espectacular y los propietarios encantadores. Un 10!!

Ubicado en un lugar precioso y tranquilo. Todo muy limpio y cuidado al detalle. Los amfitriones, Ana y Xurxo, encantadores y atentos. El desayuno deliciosl y abundante y se adapta a cualquiera. Una estancia de lujo en un espacio privilegiado, donde te hacen sentir como en casa. Sin duda repetiremos pronto. ¡Gracias!

La única pega es que necesitamos el coche para desplazarnos. Del resto de cosas es mejor que vallas y lo pruebes, ni defrauda ni se pueden poner pegas.
Ojalá fueran la mitad de los sitios así.
Lo mejor las terrazas para aprovechar a cenar con lo que compres.

Es un lugar perfecto para desconectar. El entorno es de una paz absoluta en medio de la naturaleza, y la ubicación es perfecta para poder visitar la zona. Las habitaciones están genial, limpias con baño amplio y camas cómodas. Los dueños son cercanos y cuidan los detalles,... Por ejemplo ponen flores naturales en la habitación y los productos del desayuno (están bueniiisimos) son totalmente caseros. Todas los recomendaciones que nos han dado sobre la zona durante los diez días que hemos estado allí han sido un acierto. Nos hemos sentido como en casa!

Enclavado en un precioso paraje lleno de paz y tranquilidad, para disfrutarlo paseando. Tanto la habitación como las estancias, el desayuno y el trato recibido fueron geniales. El alojamiento dispone de parking privado.

Estuvimos rodeados de naturaleza en un entorno espectacular inundado de paz, la habitación muy cómoda y bonita. La anfitriona nos enseñó las instalaciones y nos obsequió con flores y un riquísimo desayuno. Tienen dos burritos encantadores que se pasean libres por la finca.