Biblioteca Volpelleres Miquel Batllori

No es muy grande pero no hay mucha gente, está bien y es cómoda.
A veces hay mucho silencio y se estudia bien, y otras parece la rambla, estaría bien que el personal hablase flojo teniendo en cuenta que es una biblioteca.

El horario de apertura es simplemente ridículo, abriendo solo por las tardes 4 tristes horas, y los dos días de entre semana que abren, a parte de abrir algo tarde, necesitan descanso para comer, cerrando la biblioteca. Inaudito… No se en que cabeza cabe…

Hay más ruido en la biblioteca que en la calle. Es increíble la falta de respeto de alguna gente que entra manteniendo conversaciones con el mismo tono de voz que si estuvieran en las ramblas. Los trabajadores tampoco tienen ningún tipo de respeto y hacen todo el ruido posible. En según que horas esto parece más una guardería que una biblioteca (niños llorando, gritando, corriendo, etc...).

En teoría esto es un lugar de lectura, estudio y concentración PÚBLICO, y no se respeta ningún criterio que lo facilite.

Como es posible que hagan ese horario por el amor de dios.deberian abrir todo el día.
La cola del paro está llena de gente que quiere trabajar.

Vengo casi cada día de la semana y es increíble el ruido que hacen los propios trabajadores. Está todo el mundo en silencio, haciendo sus cosas, mientras que los trabajadores hablan en el mismo tono que utilizarían en un bar. Por las mañanas está cerrada, por la tarde, si llegas sobre las 16.30-17:00 encontrarás sitio.

Es una lástima porque el espacio es muy agradable, excepto cuando se les ocurre organizar una actividad para niños pequeños en una de las salas de la biblioteca. Entonces, más que una biblioteca parece un colegio, con continuos gritos y constantes entradas y salidas de los niños de la sala. Por no hablar del ruido que hace el propio personal, que parece no tener claro el concepto de biblioteca ni el nivel de silencio que la gente usuaria viene buscando. Difícil concentrarse.

Las instalaciones son geniales y los horarios, aunque no son muy amplios, los amplian en fechas de exámenes (enero y junio). Sería un muy buen sitio para concentrarse si no fuera por el ruido: cuando hacen actividades para niños, parece una guardería, niños entrando y saliendo, corriendo, gritando y llorando por toda la biblioteca. Los padres y madres que los acompañan también hablan fuerte, y el personal de la biblioteca ni se immuta

Considero que esta biblioteca tiene un gran potencial, aunque se me van las ganas de ir cuando veo el tipo de personal que tienen, sin ninguna duda es la biblioteca en la que peor me han atendido de todas las que he ido, además su falta de motivación por trabajar es pésima. Mis principales quejas van dirigidas al señor de gafas en el mostrador de información, siempre te contesta con un tono de voz inadmisible, es sorprendente que trabaje en un cargo público, estoy segura de que hay miles de personas que podrían ser mil veces mas agradables y buenos bibliotecarios que este señor. El debe pensar que esta biblioteca es suya o algo por el estilo, y eso le da derecho a comportarse inadecuadamente. Ojala esta situación se arregle.