Hemos vuelto, ya que la primera vez nos quedamos con ganas de probar más cosas. Y por supuesto, nos ha encantado! Son muy amables y atentos. Las hamburguesas deliciosas, así como lo que pedimos para picar. Sin duda, volveremos!
Miguel Ángel C. E. (Miguel)2 años atrás
El servicio atento y amable. Para mi gusto generan escesivo hipe cuando te presenta la carta. El entorno es bonito: la terraza está bajo el conjunto románico de Ripoll. El dos es por el producto: me pongo en plan pesadilla en la cocina. No puedes ofrecer como bravas unas patatas Deluxe congeladas con salsa barbacoa. No cuesta nada tener unas patatas, que no se estropean y freírlas al momento. Y ya no te digo una salsita brava. Excesivamente grito y casi quemadas. Las croquetas igual, excesivamente aceitosas. El precio, lo acepto por el entorno, nada más. Levantar un negocio cuesta mucho, lo sé. Pero si se hace con cariño y con mimo, como si fuera uno mismo puede ser mucho más que sólo un negocio.
Nere A2 años atrás
Me encanto el trato, los camareros super amables y muy buen rollo, lo que más me gustó es que nuestros peludos pueden entrar sin problemas, y lo mejor que les ponen agua y les dan de comer!! Genial en todos los sentidos!!
Ruben Lopez2 años atrás
El personal és increíblemente amable, las hamburguesas y los postres son buenísimos (recomiendo el cheese cake), absolutamente dog friendly, les encantan, un sitio al que volveremos seguro, y Fosca también.
Acj c2 años atrás
Buen lugar donde passar el rato excelentes hamburguesas i personal muy simpático lo recomiendo en un 100%
SANTI LA MONTECARLO2 años atrás
Bien atendido, hambusguesas buenas. El precio.... un poquito caro por la cantidad que ponen.
Tomeu Adrover Pascual2 años atrás
Ufff, que decir... Allí te puedes encontrar de todo. La comida nada del otro mundo, ni cara ni barata ni buena ni mala. El ambiente es diferente. Los clientes que había en la barra entraban en la cocina como si fuese su casa. Otra mesa que había pidieron pizzas en otro sitio porque la cocina no daba para más dijeron. Un sitio para no aburrirte.
Daniel Delgado2 años atrás
Estos panas de @alesiacafe nos dejaron maravillados a mi esposa @maryolpaz y a mi primero que todo por lo buena nota que son los dos Albert y todos los demas chic@s de este lugar que tiene un lugar privilegiado en la bella #Ripoll justo al frente del Monasterio. Son unos emprendedores de primera línea. Un menú elaborado con mucha dedicación y amor, con excelente materia prima de proximidad y mucha creatividad. La variedad de tapas o entradas se pierden de vista pero las patatas bravas y los nachos Alesia son insuperables. Las hamburguesas provoca pedirlas todas porque cada una es muy especial. Me fui por la llamada Barbacoa y flipé, sobre todo cuando Albert Bernabé nos contó que la receta de la salsa era de su mamá. Mi amor pidió la especial con cebolla caramelizada y queso de cabra. Para ambos fue una experiencia gastronómica marvillosa. El local es #petfriendly y están abiertos durante todo el día. Hay días con música en vivo y para los días húmedos tienen un salón bastantr amplio y acogedor. #imperdible
Y por supuesto, nos ha encantado! Son muy amables y atentos.
Las hamburguesas deliciosas, así como lo que pedimos para picar.
Sin duda, volveremos!
El entorno es bonito: la terraza está bajo el conjunto románico de Ripoll.
El dos es por el producto: me pongo en plan pesadilla en la cocina. No puedes ofrecer como bravas unas patatas Deluxe congeladas con salsa barbacoa. No cuesta nada tener unas patatas, que no se estropean y freírlas al momento. Y ya no te digo una salsita brava. Excesivamente grito y casi quemadas. Las croquetas igual, excesivamente aceitosas.
El precio, lo acepto por el entorno, nada más.
Levantar un negocio cuesta mucho, lo sé. Pero si se hace con cariño y con mimo, como si fuera uno mismo puede ser mucho más que sólo un negocio.
Allí te puedes encontrar de todo.
La comida nada del otro mundo, ni cara ni barata ni buena ni mala.
El ambiente es diferente.
Los clientes que había en la barra entraban en la cocina como si fuese su casa.
Otra mesa que había pidieron pizzas en otro sitio porque la cocina no daba para más dijeron.
Un sitio para no aburrirte.