Muy atentos, pedí un bocadillo aunque me apetecían una patatas bravas y me los prepararon también con la sonrisa del barbijo que ahora se lleva de rigor y aunque el bar es pequeño se siente el corazón grande, se nota en su trabajo. Toca ser conscientes del esfuerzo que después del Covid está generando en la restauración y su casi inexistente en alza. Apoyemos a los cafés que muchas veces son los refugios de esta vida sin frenos y que lucha por un mundo mejor.
Toca ser conscientes del esfuerzo que después del Covid está generando en la restauración y su casi inexistente en alza. Apoyemos a los cafés que muchas veces son los refugios de esta vida sin frenos y que lucha por un mundo mejor.