Starbucks

Es el único café decente que se puede conseguir en el parque y no hay opción a que te den taza normal, obligatoriamente es vaso de usar y tirar. En teoria te dan la opción de traer tu propio vaso reutilizable pero sinceramente en un parque de atracciones no creo que nadie se acuerde de llevar ese vaso desde casa o en caso de que lo compre es muy posible que se le acabe rompiendo, no me parece una opción realista.
El café como en todos los starbucks, probamos también una cookie y un muffin de chocolate que no estaban mal.

Nada que ver con el resto de Starbucks. Aquí todo lo hacen rápido y mal. Pedimos un chai latte con soja y un chocolate praliné. El té apenas estaba infusionado y el chocolate completamente aguado. No sé si por falta de experiencia del personal, falta de ganas de trabajar o falta de personal para el volumen de trabajo pero si volvemos a la Warner no repetiremos. Además el chico que nos atendió fue un poco maleducado queriendo cambiarnos un peluche de recuerdo por las bebidas.

Siempre que voy me pido lo mismo, y no hay día quebno se equivoquen en algo, siempre les falta algún ingrediente o te ponen otra cosa, encima se lo dices y te contestan de muy malas maneras, ayer se volvieron a equivocar, al decírselo la empleada mayor sin ningún tipo de educación contestandonos como si fuéramos idiotas, cuando fueron ellos que no prestan atención a lo que están haciendo. Una pena, pues la próxima vez me pensaré muy mucho si vuelvo.

Comida y bebida buena, pero el local es un poco pequeño, y estaba lleno de avispas.

El horario está bien, ya que puedes ir a cualquier hora mientras la Warner esté abierta.

Los cafés están geniales pero algo caro, además de la foto a lo que te dan parece una estafa

Las bebida luego poco tienen que ver con las de las fotos.

Tuvimos un problema con unas máquinas expendedoras, fuimos a pedir ayuda allí (donde nos indicaron) y malísima la atención por parte de la camarera, poniendo caras y hablando de malas formas.

Disfruté de una agradable experiencia tomándome un Frappuccino en el Starbucks de la Warner Bros.