CAFE BAR TAINO

Durante mi estancia en Caldas de Reis fuimos tanto a comer como a cenar, al mediodía comimos el menú y nos sorprendió porque estaba todo buenísimo y casero a parte de muy bien presentado. 100% recomendable, tiene mucha variedad de platos y los camareros muy agradables. De 10!

Local amplio, buena atención al cliente y rapidez en el servicio. Buena comida, cantidades generosas.

A palo seco. Es un lugar agradable. Tiene parking muy cerca. Eso si, consumiciones a palo seco a menos en mi caso.

Hemos parado por casualidad y nos hemos llevado una grata sorpresa. Se come de maravilla y a muy buen precio. Los chipirones a la plancha están de muerte.
El señor que nos atendió (parecía el dueño) era majísimo. Atento en todo momento y pendiente de que no nos faltase de nada. Nos encantó el lugar. Volveremos seguro.

Recomendado 100%.
Las pizzas caseras están increiblemente buenas (pedimos de pulpo y de jamón asado) y más de lo mismo con los bocatas, croquetas y raciones.
Muy barato y la atención muy buena.
Por poner un pero diría el poco aforo que tiene al ser un local un tanto pequeño.
Por lo demás, todo 👌.
Desde luego que volveré.

Cerca del hotel donde nos alojamos. Decidimos cenar allí y la verdad que fue un acierto. Queríamos unos bocadillos y el camarero muy amable nos aconsejó probar productos de la zona el bocadillo raxo con queso tetilla y pimientos de piquillo. Pan muy bueno, crujiente y muy grandes. Buena calidad precio.

Sitio acogedor al que habíamos ido a desayunar (la camarera estaba sola y tardó en traer las cosas pero algo razonable). Por ello, decidimos ir un día a tomar algo y a cenar… y no volveremos! La atención a desgana y tras quedarnos y pedir dos hamburguesas, después de 40 min de espera y que le traigan a los de la mesa de enfrente toda la cena habiendo pedido hace 10 min…. Pues como que no. Además de que preguntarles y decirnos que, “uffff va para rato”. Será barato y se comerá bien (no pude comprobarlo) pero esa desgana no hay dinero que la pague.

Buen bar para ver deportes, en algunas consumiciones ponen pincho pero en la mayoría no. Los camareros suelen estar desbordados y el trato no es del todo agradable