Boutique de Café

La verdad no le tenia mucha fé, pero superó mis expectativas, me encontraba pasando justo por la zona con mi familia y dijimos... "pidamos algo" y todo lo que pedimos fue excelente... muy rico, se pudo disfrutar de lo que se pidió y la atención fue de diez, se preguntó que tenía cada cosa y todo se respondió con amabilidad y sabiendo de lo que tienen en el lugar...

En esta ocasión probé el capuchino ilicitano 🌴

Estaba muy rico tenía un dátil relleno de crema de cacahuete y el café en su punto se nota que es de buena calidad ☕ .

El Servicio como podéis ver en la foto tiene un robot que algunos habréis visto en algún sushi jajaja muy curioso la verdad. Además también tienen bastante gente atendiendo que aunque tarda un poco en salir la bebida y la comida merece la pena.

Entramos a tomar un helado en esta cafetería, siempre que entró a un sitio mis ojos van a la limpieza y orden del lugar, en este caso vitrinas limpias, mesas, y las camareras limpias, os diré lo que yo y mi marido tomamos, ,pedí un helado de dulce de leche, bien presentado en una tarrina con un cucurucho pequeño y el helado estaba bastante bien logrado en sabor y textura, luego un café solo bien hecho pero nada a destacar en cuanto a sabor y un agua con gas, el precio me pareció un poco por encima de los normal, aunque en este tipo de consumiciones evidentemente se nota menos pero ,aún así un poco caro, en cuanto al local una decoración sencilla y original usando y aprovechando las imperfecciones del techo con hierro y bombillas protegiendo los cable con manguera, en cuanto a las camareras en este caso amabilidad y nada que objetar.,quizá vuelva a repetir por la pinta que tenían los helados y probar otros sabores, tienen extensa carta de tartas, gofres etc

Tenía ganas de probar este sitio, pero me han sorprendido lo increíblemente mal hechas que están sus tortitas, apretadas, duras por un sitio y crudas en otro. No entiendo de cocina pero creo que es bastante difícil hacerlas tan mal. Añadiendo la seriedad y poca amabilidad de las trabajadoras. Espero que solo haya sido un día malo... Una pena.

El sitio bonito, el servicio regular... Pienso que era porque tenían mucha gente. Nos dijeron que enviarían al robot a servirnos la comanda(lo pedimos por el niño, que le hacía ilusion) dijeron que si, y al rato nos lo llevó la chica a la mesa sin más explicación que es que allí no se podía (nos lo podía haber dicho desde el principio) café bueno, leche preparada o merengada mala y la tarta regular, mucha vista pero sin sabor. Precios acordes a una cafetería de centro, medio-alto.

Un lugar al que suelo o mejor dicho solía ir a menudo. Hasta hace unos meses todo genial, pero se ha estropeado mucho. La atención de las camareras pésima, rayando la mala educación. Pides lo que quieres tomar , te ponen lo que les da la gana ( incluidos ingredientes que no están reflejados en la carta) y te dicen que la equivocada eres tú . Ya es la segunda vez que me pasa y no va a haber una tercera.
Una pena , porque el local está en un sitio inmejorable, razón por la que creo que no se han quedado ya sin clientela.

Demoraron demasiado tiempo en tomar el pedido y eso porque avisamos nosotros . Luego para que nos lo traigan otros minutos más ... Lo peor es que es recurrente le dimos una oportunidad más y volvió a pasarnos .
Nota :me acerque a caja para apresurar el pedido y me dieron como respuesta que se toma en mesa el pedido en fin .. 40 minutos entre la espera de que vengan a tomarnos el pedido y que nos lo traigan y claro nunca llegó porque nos fuimos adicional que eran 3 camareros

Me encanta el café que tienen, sin duda de los mejores. Desgraciadamente hoy no lo pude tomar porque a 12°C (11:55 am) de temperatura tienen dos estufas encendidas en la terraza, y según la camarera, no las pueden apagar ni alejar de una mesa para comodidad de los clientes. Hoy no pude disfrutar de su buen cafe por el "buen" quehacer de una camarera