Casa Rural La Fábrica De Nacelrio

La casa entera es una maravilla: su acogedor salón, las habitaciones y apartamentos limpios y cuidando hasta el más mínimo detalle... Sin olvidar la espectacular piscina en la que te puedes dar un baño rodeada de pura naturaleza.
Y por supuesto, hacer especial mención a los dueños, que siempre nos han tratado con una amabilidad y esmero a los que ya, por desgracia, no estamos acostumbrados, y que sinceramente, es de agradecer.
Cuando rememoramos nuestras vacaciones, siempre hay un recuerdo especial (sobre todo de mis hijos) a los deliciosos platos caseros que preparaba M Carmen y a la amabilidad con la que Roge nos atendía.
Todo ello rodeado de un entorno espectacular.
Llevamos dos años seguidos visitandolos y seguro que volveremos.

Un sitio maravilloso, unas vistas espectaculares. La casa una maravilla , los anfitriones encantadores, todo lo q necesitarás sin problema . El ruido del agua corriendo del río justo al lado de la casa es relajante y la ruta q comenzamos allí, bajando justo de la casa, la ruta del Río Cerezuelo, una pasada. La recomiendo al 100x100. Volveremos

Acudimos por casualidad tras llegar casi al final de la ruta del río Cerezuelo, preciosa por su vegetación, cristalinas aguas y "piscinas naturales".
Encontramos una terraza fresca y estupenda en una tarde acalorada.
Te hacen una limonada artesanal riquísima, una ensaladilla de pimientos de rechupete y un arroz caldoso a la lumbre para repetir, pero no por falta de abundancia.
Atendidos por la exquisita atención y amabilidad de Carmen .
Repito seguro.

Después de una bonita caminata hemos dado con este lugar donde te puedes refrescar y tomar energía para continuar. Las personas que los han atendido, encantadoras y con muy buena voluntad explicando cómo regresar por el mejor camino y aprovecharlo con otras visitas.
Sin duda... volveré.

Recomendable 100 por 100, los propietarios, Rogelio y Mari Carmen, son unas personas cercanas, amables.... el sitio es precioso, no dan ganas de irse porque estás rodeado de vegetación y el sonido del agua...super relajante. Preparan comida casera buenísima. Todo genial, esperamos volver pronto

La casa es muy acogedora, situación espectacular a pesar del acceso que no lo llegas a notar por el buen hacer de sus propietarios que te llevan y recogen cuando lo necesites. El trato fue muy agradable, gracias.

No tengo palabras para describir mi estancia. Esa sensación de hogar que transmite la casa pero sobretodo Rogelio y Mari Carmen que me han hecho sentir como en casa o mejor desde el primer momento, así se lo hice saber. Repetí dos fines de semana seguidos.
Humildad, calidez, comida casera, las camas comodísimas, balcones al río, conversaciones enriquecedoras con ambos.
Esperando el momento de volver.
Mil gracias por todo.

Mi pareja pilar y yo disfrutamos de unos días maravillosos y la mar de tranquilos. Volveremos lo antes posible a disfrutar de la deliciosa cocina de Mari Carmen. Más que recomendable para desconectar y sentirse como en casa.
Dar las gracias a Rogelio, su mujer Mari Carmen y a sus estupendas hijas Ana y Carmen.