Casa Rural La Barbacana

Las casas están bien, pero le falta limpieza y el lavabo perdía agua y gotera en el techo, y la terraza faltaba un toldo y una manguera le da mucho sol y no se puede refrescar

La casa está muy bien equipada,pero le falta limpieza.

Falta mantenimiento general: las 3 puertas rozan en el suelo, hacen ruido y no pueden cerrar. Poca señal en la TV con pocos canales y desordenados. Reforma con materiales baratos con algunas paredes de casi cartón, paredes con manchas y agujeros, paletas de cocinas de plástico y rotas, etc. El resto bien. Esta opinión es constructiva, para que se solventen los problemas que comento y pueda así el propietario mejorar su alojamiento

La expectativa era alta y la percepción decepcionante. La limpieza mínima, aparador lleno polvo al igual que bajo de las camas, del mobiliario, la mesa del comedor tiembla y se mueve con un dedo, el sillón de la foto no estaba y éramos cuatro para sentarnos en un sofá-cama de tres sumamente incómodo. Los almohadones de las camas escasos, el único WC, falto de mantenimiento, no funcionaba el aparato de eliminación de olores. Tuvimos que comprar en Mercadona ambientador WC y estropajos. Por no hablar de las tres cucarachas en dos días. La antena de la TV tenia suelta la clavija y tuvimos que repararla. La parte buena el patio interior aunque con un mobiliario que ha vivido mejores tiempos, tiene buen equipamiento de menaje, la zona es tranquila y se puede aparcar en la puerta. Engaña en el plano la ubicación, ya que para acercarse a la ciudad se sube y baja andando la montaña donde se aloja la Barbacana, el almacén de hielo.

Instalaciones en buen estado, casa cómoda de fácil acceso con un patio para sentirte como en la calle sin salir de casa con todos los servicios necesarios. Pasamos un fin de semana muy agradable. Recomendable

La casa es muy acogedora y encantadora. Se encuentra muy limpia y dispone de todo tipo de servicios. En resumen, para volver a repetir!!

Una casa rural con encanto y totalmente recomendable. Fuimos 5 amigos a pasar la Nochevieja buscando un sitio tranquilo y que nos permitiese estar cerca de un entorno natural a la vez que en población. Quedamos encantados los días que estuvimos. A destacar también la amabilidad del dueño, que nos esperaba con la chimenea ya encendida y nos facilitó un plano con la situación de la casa y cómo llegar paseando al centro de Barbastro.

Fuimos con amigos a pasar una noche y el sitio estaba congelado, había puesto la calefacción 5 minutos antes de llegar. La limpieza también dejaba bastante que desear. Para el precio que pagamos, mejor te vas a un hotel y no tienes que compartir el baño.