Casa Rural Zulueta

Acabamos de salir mi chico y yo de la casa y no tenemos palabras de agradecimiento….IMPRESIONANTE! La casa espectacular, su entorno de ensueño y que decir de los dueños…un amor. La atención espectacular, la limpieza de 10 y el desayuno hecho por la dueña estaba riquísimo. Lo dicho, no hay palabras que podamos describir lo bien que hemos estado, solo nos queda recomendarlo y que lo visiten muchísima gente porque se merecen lo mejor! Un abrazo enorme 😊

Ya he ido dos veces y tengo intención de repetir. Un lugar tranquilo, con mucha naturaleza y un ambiente inmejorable. Los dueños, un matrimonio encantador. Aloña, la dueña, una anfitriona cercana, simpática y muy agradable, siempre preocupada de que el cliente esté bien, prepara todas las mañanas un desayuno variado, bizcocho casero incluído, que está muy rico, que está incluído en el precio. La casa preciosa, con habitaciones espaciosas, bonitas y muy limpias. Mucho más que aconsejable.

Recomendable,cien por cien,un puente genial ubicación de la casa espectacular,limpieza total,todo muy cuidado con muchos detalles
Aloña una gran anfitriona ,me encantaría volver

Sitio con encanto en medio de la naturaleza, limpieza y comodidad, la dueña es muy amable, te prepara el desayuno cada mañana con un bizcocho casero, es un detalle. Da gusto dormir rodeado de grillos, y los cantos de los gallos al despertar. Inmejorable.

No queríamos irnos. Es un sitio mágico, rodeado de naturaleza, en el que solo se oyen los cencerros. Olaña es fantástica, te atiende con todo su cariño y deja preparado el desayuno todas las mañanas, con un bizcocho que hace ya con los ojos cerrados, como dice ella, xq hace uno cada día. Todo limpísimo y tratado con mucho cariño. Muchas gracias por todo 😊

La casa esta bien equipada, Aloña es muy agradable y bona anfitriona. Su sidra está muy buena y disfrutamos de la estancia.

Recomendable 100x100.
Casa estupenda, habitaciones amplias, todo muy limpio, desayuno incluido y además con un bizcocho buenísimo.
Y agradecer a Aloña (la dueña de la casa) que es un solete, pendiente de todo.
Aloña, un besote de toda la familia

Un sitio encantador. La dueña súper agradable y simpática, como si fueras de la familia.
El sitio es algo complicado, pero dos viajes y lo tienes listo.
Un sitio increíble, vistas maravillosas y una tranquilidad que no se paga con dinero.
Una buena experiencia, sin duda.