Gaikoetxe

El caserío está ubicado en plena naturaleza, al lado de Zarautz, inmejorable. Las habitaciones cómodas y limpias. Y los dueños Begoña y José Luis chapó. Volveremos

Pues pensaba haber puesto una muy buena reseña, la verdad. El precio genial, el lugar genial, el trato y el desayuno muy bien... Incluso se molestó en buscarme galletas sin gluten.
Pero por fuerza mayor tuvimos que irnos un día antes y nos lo cobro, incluso el desayuno que no estuvimos... Una parte bueno... Es entendible... Pero sabiendo que había sido por un motivo así... Una pena, la verdad... Nos hemos ido con mal sabor de boca.

Estuve el verano pasado con un amigo y este año volveremos. Begoña y su familia son gente encantadora y amable que siempre quieren ayudar.

La casa es preciosa, con muchas comodidades y tranquilidad, además llegas a Zarautz en 5 min. en coche. Tienes rutas cerca, animales...

Es fantástico

Hemos descansado muy bien y el entorno era inmejorable. Begoña ha sido muy acogedora y atenta, sin duda lo recomiendo.

Hemos estado 5 noches y totalmente recomendable. Muy tranquilo, tocando la naturaleza y con unas muy buenas vistas. Todo muy práctico, cómodo y limpio. La cocina tiene de todo. Ha sido todo un acierto.

Espectacular trato de la propietaria, muy buen lugar para descansar

Solo estuvimos una noche en septiembre y llegamos en taxi desde Zarautz en 5 min. Begoña nos estaba esperando con su sonrisa en su precioso Caserio. rodeado de campo, con jardinería muy cuidada y hermosa, así como bancos y mesas exteriores. No sé como pueden con tanto trabajo para mantenerlo todo tan bien y tan limpio. La habitación amplia con bañera y bidé. Balcon con mesa y sillas. Colchones muy confortables. Sin costo añadido calentamos la cena en una amplísima cocina totalmente equipada, el comedor muy amplio con mesas y sofás. Mas temprano de lo usual nos preparó junto con su esposo un estupendo desayuno y nos acercó a Zarautz en su coche sin coste. Para terminar agradecerle a Begoña su amabilidad y botiquín para curar un problema en los pies. Compartimos estas mismas impresiones con una joven pareja eslovena que cenaban en la amplia y superlimpia cocina. Muchas gracias por todo, sobre todo por vuestro trato.

Aunque está un poco lejos de Zarautz, apenas se tarda 10 minutos en llegar a la playa, y tiene la ventaja de la tranquilidad y alguna ruta que pasa por delante. Igual se echa en falta algún sitio donde tomar algo cerca.
Begoña está siempre dispuesta a ayudarte y recomendarte sitios, y tanto las habitaciones como los salones y cocina comunes están limpios y listos para su uso.