Casa Rural Daroca

Estuvimos unos 30 amigos a mediados de junio. Todo perfecto. El casero fue muy amable con nosotros desde que llegamos y además, la casa estaba limpia y preparada cuando llegamos. La casa es enorme. Destaco que la discoteca privada, la piscina y que tiene zona para aparcar los coches. Recomendado 100%.

Los 3 últimos veranos nos hemos reunido 40 personas en esta casa y ha sido una experiencia increible. La casa, tanto por dentro como la zona de la piscina, es enorme, destacando la discoteca profesional interior, la cual no tiene nada que envidiar a muchas discotecas de cualquier ciudad. Dejamos la casa perfecta, por lo que la fianza fue devuelta de forma íntegra. El propietario muy amable. Sin duda, volveremos a repetir!

¡¡MUCHO CUIDADO!!
El dueño no tiene ningún tipo de escrúpulo. Va a hacer todo lo posible por quedarse con la fianza, ya sea porque no has limpiado la casa de arriba a abajo (es enorme) como por desperfectos que ya estaban anteriormente. En algunas habitaciones no hay calefacción y el baño esta en unas condiciones deplorables. Alojamiento NO recomendable.

Fuimos un grupo de 30 adolescentes una semana, y la verdad que super bien, la casa estaba genial y tenía de todo. El único problema es que si se hace una fiesta no se puede estar ni en la terraza ni en la piscina ya que los vecinos escuchan todo, y te tienes que quedar encerrado en la discoteca. Quitando eso una experiencia maravillosa.

Nos juntamos unos amigos de Twitter, unas 36 personas para pasar un fin de semana a mediados de junio y disfrutamos lo más grande! las instalaciones están perfectas, la casa es enorme y tiene todo lo necesario para despreocuparnos por completo! Manuel, el dueño, se mostró totalmente disponible para todo lo que necesitáramos y la comunicación con el fue muy buena tanto antes, durante y después de la estancia. Ningún problema con la fianza, nos organizamos por grupos y zonas, para dejar todo como lo encontramos, y todo genial!

Una experiencia de 10, soltero conjunta de unas 40 personas aproximadamente.

Desde el principio ha habido un trato natural y basado en la confianza. Las instalaciones, a pesar de tener algún pequeño recobeco sin pintar, están totalmente equipadas para pasarlo estupendamente y con mucha atención a los detalles.

La devolución de la fianza fue en el plazo de una semana tras comprobar que no había daños.

Un impresentable el dueño. Nos quitaron los 600 pavos de fianza por dejar "sucia" la casa y romper algún vaso por accidente, coger hielos de su nevera y cosas así, y alguna otra cosa también nos dijo que la rompimos cuando ya estaba en ese estado. No recomiendo ir.

Volveré sin ningún duda ninguna. Genial para pasar unos días, descansar o celebrar eventos. El propietario muy amable ¡Mejor imposible!