Sanatorio Adaro
C. José María Jove y Canella, 1, 33900 Langreo, Asturias, España
2.8
26 reseñas
8 comentarios
78RF+RV Langreo, España
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"A iniciativa de la Sociedad Metalúrgica Duro Felguera, fue fundado en 1910 por Luis Adaro y Magro como hospital para accidentes laborales, aunque no se puso en marcha hasta 1915. Edificio de grandes dimensiones y rodeado de una amplia zona ajardinada.
El edificio tiene planta en forma de peine y consta de cinco pabellones. Los muros son de ladrillos enlucidos y pintados en su fachada trasera y con plaqueta de ladrillo en la delantera
En su origen se llamaba «Hospital de Heridos» y no fue hasta 15 años más tarde cuando se bautizó con el nombre de su fundador, que todavía hoy conserva y por el que se conoce «Sanatorio Adaro».
Pasó de ser un referente en la medicina laboral, por el que pasaron miles de mineros, a convertirse en una institución centenaria concertada donde pueden encontrar ayuda habitantes de la comarca (y de fuera) de todas las edades: desde la reciente Unidad de Atención Temprana, que ayuda a niños con problemas, hasta las plazas geriátricas que ya hace años disfrutan muchos vecinos."
Precioso edificio histórico y cargado de historia e historias.
En el campo de los psicólogos suelen dar consejos muy generalistas, tipo "sal a caminar y despeja o no estés mal", para eso le preguntas a un amigo o familiar. En el lado de los psiquiatras el asunto es algo mejor, pero claro, los tratamientos por medicación de estas enfermedades son duros y se pasan mal al dejarlos.
No lo recomiendo, en su día solo perdí el tiempo yendo ahí y mi salud mental solo empeoro.
Le pongo 2 estrellas, porque hubo una trabajadora de psiquiatría que fue muy amable y su tratamiento me funciono en el corto plazo.
Cuidaos mucho.
Digo yo que salud mental está en el Adaro y que podía haber sido tan amable de darme el número.
Viendo el personal así serán los servicios que ofrecen a las personas.
Así nos va.
Derivaron del hospital San Agustín a mi tía que había a sufrido un ictus en plena pandemia, para seguir una serie de curas, derivadas de no poder moverse y de una hemorragia que le salió a cuenta del ictus, y debo decir que la atención y la información a la familia ha sido extraordinaria, y en especial al Doctor Santiago.. por su buen hacer tanto profesional como humano. Gracias Doctor