Ermita Santa Cruz

Pequeña y tradicional, 100% del barrio más alicantino.
En Semana Santa es un lugar excepcional, seas o no creyente, es uno de los lugares que no podemos dejar de visitar.
Hoy hemos estado mientras los costaleros estaban ensayando y ha sido precioso.

Cien por cien recomendable

De los mejores lugares de Alicante para visitar, subir a la ermita, fotografiar sus calles y sus vistas... precioso casco antiguo. Necesita unos cuidados la parte más alta, por eso 4 estrellas. No se puede subir con carro o silla de ruedas, el último tramo son todo escaleras.

La ermita en sí es normal, y suele estar cerrafa, pero la ubicación es genial, por el barrio y por el mirador

Ermita situada en el mismo corazón del barrio de Santa Cruz, totalmente ajeno a la bulliciosa ciudad de Alicante, y a menos de 10 minutos del mismo centro. Las vistas que ofrece el lugar y el paseo que nos trae hasta este punto, a través de calles escalonadas de este barrio antiguo, hacen ineludible su visita.

Barrio tradicional de Alicante, muy visitado pero en semana santa principalmente. Sus procesiones y sus pasos, tienen que estar subiendo y bajando constantemente por lo estrecho de las calles y evitar los balcones, también hay tramos que se hacen de rodillas por los escalones. Lo disfrutaréis, suponiendo que encontréis sitio para verlo.

El barrio más bonito de Alicante..💙💙

Es un sitio que no te puedes perder si vienes a Alicante, el barrio es maravilloso y las vistas desde la ermita son geniales, se ve toda la ciudad.

Un delicioso recorrido por sus empinadas vías nos situarán en las faldas del castillo, visitando además elementos tan destacables como la Ermita de la Santa Cruz, casa oficial del Cristo de Medinaceli, al cual llaman “El Cautivo”.

Una imagen que durante la Semana Santa recorre con paso firme estas angostas calles despertando el sentimiento más religioso del barrio. Sin duda alguna una de las procesiones más emotivas y esperadas por los habitantes de Alicante durante esas fechas.

Santa Cruz tiene un sabor especial, un sabor a otro tiempo. Casitas bajas dispuestas a un lado y otro de la calle, puntos estratégicos en los que podemos descubrir miradores con vistas asombrosas, una luz privilegiada que alumbra cada una de las vías del antiguo barrio y ante todo tradición, mucha tradición repartida por sus escaleras, callejones y esquinas.

Pero además, después de recorrer los encantos diurnos de este rincón de la urbe, también podemos disfrutar de su vida nocturna. Y es que el Barrio de Santa Cruz es también una de las zonas más animadas de la noche alicantina. Bares, restaurante y pubs abren las puertas cuando el sol cae. Música en vivo, buenas copas y un ambiente de lo más animado para refrescar las noches en este mítico lugar.