APR Motor
Av. de Sta. Mariña, 228, 15405 Ferrol, A Coruña, España
3.4
44 reseñas
8 comentarios
FQWH+MW Ferrol, España
Reportar ubicación
Reclama esta ubicación
Lunes: 9–20
Martes: 9–20
Miércoles: 9–20
Jueves: 9–20
Viernes: 9–20
Sábado: 9–13
Domingo: Cerrado
Martes: 9–20
Miércoles: 9–20
Jueves: 9–20
Viernes: 9–20
Sábado: 9–13
Domingo: Cerrado
El coche que hemos comprado nos ha estado dando muchos problemas, el último problema ha sido que se rompió el turbo y el motor y solo hace 2 años y medio que lo compramos y llevándolo continuamente al taller y cuidándolo.
Así que ha sido un timo por parte de esta persona.
Sin contravenir lo expuesto en mi reseña más abajo, me veo obligado a advertir a los posibles compradores de las condiciones de garantía que el vendedor pacta con sus clientes. En el momento de la venta, aquel proporciona al adquiriente un contrato ficticio, sin firma ni ningún sello oficial, a sabiendas de que la empresa que figura en el mismo, en mi caso Ibérica Garantías, con sede en Las Palmas de Gran Canaria, no está obligada por ley a responder de ninguna avería en el vehículo, sino que debe ser el propio vendedor quien responda de los problemas que pudieran surgir durante el primer año. En el momento que se detecte cualquier incidencia en el normal funcionamiento del coche, toda la responsabilidad de hacer frente a aquella recae en el compra-venta. Dicho de otro modo: el mencionado documento de garantía no sirve para nada, es un engañabobos cuya función es hacer creer al cliente que su coche está cubierto por una garantía externa con el objeto de que, en caso de avería, aquel pacte con la empresa ficticia la reparación, a la que por supuesto no podrán objeccion alguna. Una vez que el cliente ordene ejecutar las correspondientes acciones de reparación, el compraventa queda exento de su responsabilidad sobre arreglos que no ha autorizado. La empresa fantasma, por su parte no pagará nunca, y dará todo tipo de excusas para no resarcir al conductor, consciente de que no existe un auténtico contrato que la obligue. En resumen: olviden ese papelito con una dirección y teléfonos inexistentes y, ante cualquier problema, diríjanse directamente al vendedor para hacer valer sus derechos. Si tienen dudas al respecto, no vacilen en contactar al IGC (Instituto Galego de Consumo) o al homólogo de su comunidad correspondiente.
El trato que me ha proporcionado Alberto ha sido tremendamente afable a la par que serio y profesional. El automóvil que acabo de adquirir, con un año de garantía, limpio y muy cuidado, parecía estar esperando por mí. El vendedor me facilitó los trámites y tuvo paciencia para que, tras haberlo probado, pudiese encontrar el momento de ir a recogerlo. Confieso que soy desconfiado por naturaleza ante personas que se muestran "demasiado ágiles" a la hora de colocar una venta a un potencial interesado, pero en este caso el entendimiento entre ambas partes ha resultado en una experiencia muy satisfactoria. Sin duda recomendaría acudir a Alberto para localizar el coche que más se ajuste a nuestro presupuesto y necesidades, teniendo en cuenta que posiblemente necesitemos más de una visita al establecimiento para volvernos con aquel, como ha sucedido en mi caso.