Eth Hurat

42 años de antigüedad, algo bueno tiene que tener. Una cebolla que se prepara por la mañana porque necesita una maceración, productos de calidad, en un restaurante super íntimo, 5 mesas, 18 comensales. Paqui es una mujer única con una historia de superación incuestionable, el precio? Pregúntale cómo lo hace y el tiempo que le dedica, lo calculas por comensales y luego saca tus cuentas. Nos abrió el restaurante expresamente para nosotros, al final tuvo suerte y le entró otra mesa, resumen de la noche? 2 mesas / 4 comensales. Paqui, siempre en nuestro corazón! Mucha fuerza

Una raclette excelente , probablemente la mejor que he probado , el queso delicioso , el jamón y las patatas buenísimas y la atención de sus dueñas fabulosa . Lugar de obligada parada en Viella sobretodo después de esquiar . No dejes de probar sus crepes

No recomiendo el restaurante en ningún caso.
Vine recomendado por el hotel donde me hospedaba.

Unos precios disparatados.

Con el dogma de que la Raclette es para 2 personas me sirvieron la ración (cantidad) de 1 persona y me cobraron el precio de 2.
6 lonchas de queso y 300g de patatas 18€
La cebolla la cobraron a parte...

Y, ¡¡dónde está la pelotita!!
la pelotita fueron 64€

Muy mal. Queso fundido en patatas hervidas con cebolla y un crepe de chocolate me han costado más que tres noches cenando de lujo en la ciudad. Como es el caso del ERA COQUELA y El RACÓ.... Restaurantes que si recomiendo.

Fraude Hurat.
Servicio especialmente atento y cuidado al que le cuesta defender su carta. Basada en productos básicos que pasan desapercibidos. Comerás una raclette penosa: Queso sin gracia, jamón no memorable… lo único que se salva es la cebolla aunque mi pareja no la probó. Crepes a 18€ … Típico sitio que no volveré y no recomendaré.

Fuimos a comer en familia y la experiencia fue realmente buena. Calidad y servicio excepcionales. Volveremos!

Productos de muy buena calidad y bien elaborados, con originalidad y cariño. Hemos estado dos noches seguidas para poder degustar los crepes y la raclette. Una delicia que recomiendo probar.

Es caro.
Es muy caro.
Es bueno.
Es muy bueno.
Hay crepes que tienen el precio justificado (la mía tenía por lo menos medio kilo de rape y varios gambones, un lujazo).
Las de postre me parecen de precio exagerado.. todo hay que decirlo.
Dos crepes Garona, un vino blanco de los mas baratos de la carta y dos crepes de postre, 90 euros.
En cuanto a atención, genial, pero es normal a mayor carestía de carta en los restaurantes mas amables tratan de ser.. imagina que encima no lo fueran.
Pepita lleva las riendas desde hace décadas, y en el valle se transmite de padres a hijos la costumbre de venir a comer aquí cuando te lo puedas permitir (al menos una vez).
Desde luego tienes que probarlo para opinar.
La mejor crepe salada que me he comido jamás.

Restaurante interesante para comer una buena raclette con productos de calidad.
La comida no resulta nada pesada a pesar de su contundencia.
Un descubrimiento.