Parador de Carmona

Las habitaciones amplias y limpias .
El entorno maravilloso .

Ahora el servicio deja mucho que desear .

Puedes estará en la terraza dos horas y no lograrás pedir nada .
Es lamentable la actitud del personal del restaurante , Absolutamente una vergüenza !!!!!!
No pueden ser más groseros y poco profesionales .
Desprestigia al sitio y el entorno .

El parador en si es bonito, quizas no a la altura de otros pero bien, pero para mi los ParadoresSiempre han tenido una magia especial , Una magia que se la daba el lugar y sobre todo las personas que trabajaban en el, y he notado que eso se ha perdido. Lo mismo Ocurre con los desayunos.Antes eran algo súper abundante especial con una variedad de todo y ahora mismo cualquier hotel de muchas menos estrellas supera con creces a los del parador.

He estado un par de veces y me encantaba hasta el sábado pasado. Estuve esperando una hora para ser atendida a pesar de llamar en varias ocasiones al camarero. Dado que no traían lo que pedimos avisamos que nos íbamos. No se disculparon por todo el tiempo que nos hicieron esperar y les molestó que nos fuéramos. Me planteo si volveré al lugar.

Vamos desde Sevilla a Carmona al parador. Hemos estado más de 40 m para que ni siquiera nos tomaran nota en la cafetería. Le he preguntado a la camarera si tenía que ir a la barra a pedir y tras mirarme 10 segundos mientras hacía otra cosa me ha dicho que iban ellos a la mesa a tomar nota. Diez minutos después sale un camarero que toma nota de las comandas de las dos mesas que están a nuestro lado pero no de la nuestra y al llamarlo nos dice ... Voy. Trae las comandas de las dos mesas y se marcha, lo llamo indicándole que habíamos llegado los primeros de la terraza y todos estaban atendidos menos nosotros y me vuelve a decir ... Voy. Cuando ya llevamos 40 m esperando entro en el comedor para preguntar y está tomando nota de otras mesas.( El salón no está lleno ni por asomo, no hay agobio de clientes) simplemente nos ha ignorado por sabra el que razón. Decidimos marcharnos sin tomar nada y a la salida lo comentamos en recepción donde una persona muy agradable nos pide disculpas que parecen sinceras.
Una pena que un sitio de esta fama y precios tenga estos fallos tan básicos.

Este Parador es precioso. Estábamos de visita por Carmona y nos acercamos para conocer y ya de paso desayunar en el Parador. Hacía bastante aire por lo que decidimos desayunar dentro, el personal correcto, el desayuno lo tomamos. Tostada frías y tardó bastante en servirse desde que se pidió. El desayuno bastante diferente con respecto a otros paradores. El lugar precioso y con vistas magníficas. Parking fuera del parador gratuito

La habitación muy bien y la piscina enorme. Pero la habitación no nos las dieron hasta las 16:30 y porque pusimos una reclamación. Mientras, nos ofrecían bajar a la piscina, aunque teníamos el bañador en la maleta y no nos daban habitación de cortesía. Bajamos a la piscina a comer y no tenían pan para los bocatas y tostas de la carta... Cuando conseguimos la habitación y nos bajamos a la piscina ya no había hamacas porque el hotel tiene pocas... Y todo con 39 grados. Y prefiero no seguir ...y encima no te dan respuesta a lo que dices, simplemente pasan de ti. Sin duda, el parador con peor gestión de los que he estado.

Estuvimos en la cafetería, la espera para ser atendidos fue de 45 minutos, parece que les falta personal. Tras la espera el servicio fue bueno pero se le olvidó media comanda... la merienda estaba buena. Una pena que un parador de una imagen así. Sin duda no volveremos a la cafetería.

Estuvimos una familia de 9 personas a comer el sábado, la comida muy buena aunque la cantidad fue menor que en otros paradores.
Pero sin embargo la atención por parte de la camarera que nos atendió, fue nefasta (camarera morena con coleta larga y cara de pocos amigos, no conseguí ver su nombre),los cubiertos, platos, cafés, etc literalmente nos los tiraba encima de la mesa, le preguntamos sobre que ingredientes llevaba un determinado plato y dijo que no lo sabía y se fue.
Los cafés con leche estaban estaban menos de la mitad de la taza, tuvimos que pedir más leche y la trajeron con muy malos modales, no retiro al principio las copas que no íbamos a utilizar, la mesa llena de vasos y copas por todos los lados, siempre le faltaba a alguien algún cubierto y teníamos que pedirlos y los traía con muy malos modales tirando los en la mesa.
Si algo así nos vuelve a ocurrir creo que es mejor hacerlo saber en el mismo momento y que tome cartas en el asunto a quien le corresponda, porque a final nos resultó muy desagradable la comida familiar