El capricho de Valérie

Estuve este sábado 29 cenando con mi mujer y mis tres hijas. El local muy acogedor, la decoración muy lograda.. Tanto los entrantes como los platos principales, buena presentación y comida muy sabrosa. Los postres espectaculares... Lo recomiendo sin dudarlo..

Hoy 15 de agosto, hemos estado comiendo, 2 personas. Hemos preguntado si podíamos quedarnos, nos han dicho que en10 mi nos ponían una mesa, nos han pasado a la mesa y casi una hora después nos han servido. En ese tiempo le comentó a la camarera si se han olvidado de nosotros y con desgana nos toma nota, más tarde le digo que está sirviendo mesas que han llegado más tarde y de malas maneras me contesta que ella sirve lo que hacen en cocina. Conseguimos que nos sirvan y al pedir la cuenta la señora que nos atiende( parecía la dueña o similar) se disculpa por la tardanza y nos invita a un chupito. Parecía que lo había arreglado un poco... Pero mi sorpresa es que le pagó y todavía estoy esperando las vueltas, no es la cantidad sino el hecho. Me he ido sin ellas. Conclusión una y más,. Las camareras bordes y despistadas cada vez que salían no sabían a que mesa. Espero por su bien que mejoren, es una pena

Un espacio lindo, con las condiciones de un hotel 3 estrellas, a mí no me tocó una experiencia ruidosa a lo mejor por la época en la que fui, y la limpieza estuvo bien. Buena atención.

Restaurante con un diseño muy personalizado y cuidado.. Tiene opciones veganas, como hamburguesa de lentejas o wok de arroz con verduras entre otras, muy rico todo...

No nos gustó este lugar. En el último tiempo he cambiado mucho a peor. Han perdido la tradicional costumbre del pincho con la bebida y encima, reaccionan con razón absurdas. Es mucho mejor Taberna Marcos o la Hamburguesería La Filomena més atentos, mejor servicio y más baratos.

Un hotel y restaurante espectacular y muy bonito. Acogedor donde los haya, en molinaseca en el camino de Santiago a poca distancia de Ponferrada el Bierzo

No me quedé a dormir solo queríamos cenar aquí hoy. No puedo juzgar la comida tampoco porque no llegamos a tener comida. El servicio de los dos camareros (dos chicos jóvenes) fue fatal. Nos ignoraron por media hora antes de poder pedir, mientras llevaban comida a gente que había llegado después. Al preguntar por el menú peregrino se fueron otra vez por media hora a "preguntar" que había. No volvieron para avisar que podía tardar un poco ni nada.
Desde el principio había preguntado por el menú vegano de peregrino, que me habían dicho que existía. Después de tiempo y después de preguntar por tercera vez, uno de ellos volvió a presentarnos las opciones. Sin ninguna amabilidad. Nos sentimos como una molestía total. Después le decíamos que entonces quería tomar el menú vegano y a eso nos respondió que no había menú que eran todo platos a parte. Bueno, preguntamos si se podían poner dos primer platos en vez de un segundo, que solo había carne. Y nos dijo que no. Sin ningún intento de resolver el asunto con nosotras, después de haber dicho antes que incluso sí había menú peregrino vegano. Bueno como el sitio tenía muy buenas reseñas nos aguantamos y pedimos verduras y patatas a parte. Lo que el pretendió no entender por minutos. Después cuando por fin habíamos pedido él volvió después de 10 minutos para avisarnos que "iba a tardar un rato" al preguntar cuando más o menos él solo decía "no sé" con voz aburrida, sin intento de preguntar al cocinero. Cuando volvió a meter los cubiertos los tiró por la mesa al revés, sin mirarnos. Ahí ya decidimos quitar el sitio. Lo comunicamos a los camareros y sin pedir disculpas ni nada nos traeron la cuenta de un acuario (la otra bebida nunca había llegado).
Nunca me habían tratado así en un restaurant, el servicio al cliente fatal!
Es una lástima porque de verdad queríamos amar el sitio

Muy mal. Tienen organizado el siguiente timo, en la pizarra publicitan menú 12€. Cuándo se hace la comanda, te dicen los tres primeros y tres segundos de menú. La sorpresa llega al pagar, ticket de 16€. Dicen que el menú de 12€ es el del peregrino (cosa que no avisan). Además la bebida del menú 16€ no está incluida. Pedimos dos cafés cortados y traen dos cafés en taza de café solo. Claro, con la misma salida de la cafetera para café solo sacan dos cortados. Muy listos. Se creen que los peregrinos al ir de paso aceptan de todo sin rechistar. Luego lo peor, al camarero (quizás Valérie por el acento no español) le hicimos amablemente las observaciones sobre lo del café y nos responde que no van hacer lo que cada cliente quiera....... que cuando tengamos nuestro bar que hagamos lo que queramos. En fin, no profesionales, aficionados y sitio nada recomendable.