Hostal-cafe gutgreco

Fuimos a comer y resulta que tuvimos que ir a la barra a pedir "por favor" que nos quitaran las cosas de la mesa, y fue una grata sorpresa la completa ignorancia hacia los clientes. Estuvimos mas de 30 minutos hasta que vino el camarero. Se va y nos dice que nos tomaran la carta rapido, 40 minutos esperando, para que se sienten delante nuestra otra gente y les pida la nota al segundo. Nos levantamos y nos vamos, escuchando las quejas de los camareros (que solo son 2).

Estuve en la bocatería, fue una grata sorpresa. Bocadillo muy bueno, patatas abundantes y buenas salsas y un postre muy rico. Servicio muy atento y ágil. Para repetir si se está por ahí.

El trato es excepcional y muy cercano. Me tocó una habitación doble un poco pequeña pero aún así para el tiempo que íbamos a pasar estaba muy bien. Los colchones y almohadas perfectas. La limpieza también muy buena.
Se puede comer en el restaurante del propio hostal, la comida es en plan platos combinados, sandwich, hamburguesas, ensaladas... todo muy rico.

Habitación amplia, buena limpieza y colchón y almohada estupendos. En la cafetería puedes comer de raciones o platos rápidos de calidad. Muy amables en el trato!

Llegamos y media hora pa que limpien la mesa nosotros yendo 3 veces a pedirselo cuando lo hacen nos hablan mal otra media hora pa que vengan a tomar nota y tratando mal si no tienes ganas de trabajar no trabajes no trates mal a la gente que te va a pagar

Pues últimamente ir a sentarte en la terraza parece que le sienta mal levantarse y atender. Tenía la mesa coja y se cayó la tostada a la mesa y el camarero lo único que dijo es te pongo algo en la pata? No cambia la tostada y no lo hizo allí se quedó la tostada pero es q me la cobro encima. Y también me parece un pasada el precio, coca cola, zumo de bote no natural y tostada casi 9€ ni los ricos. Para mí han perdido mucho.

Lo reservé porque el alojamiento en Toledo era desproporcionado. Tenía mis reticencias por ser un hostal. Nada más errado.
La habitación era amplia, y el baño moderno y muy limpio. Evidentemente no es un hotel, pero para mí es excelente. La amabilidad marcó la diferencia. Fernando fue muy amable y se notaba el cuidado al detalle. Es lo que hace que se quede como mi sitio de referencia por si vuelvo a hacer turismo por la zona con mi familia.
Después de andar todo el día por Toledo, al volver pedimos una ración para cenar en el hostal y...ufff... eso son raciones, y muy ricas, por cierto. Un día redondo.
Seguid cuidando la atención familiar al cliente. Es esa la diferencia entre arruinar un viaje o que se recuerde como una buena experiencia.

Hostal económico. Habitaciones muy limpias y cómodas...
El trato del personal genial, muy amables