Hostal Guadiana

Pasamos tres noches de nuestro viaje y volvería a repetir en caso de volver a las Lagunas, tuvimos una habitación de la parte restaurada y en relación calidad precio fue estupendo. El servicio muy majo y agradable.
(La única pega que se escucha mucho las habitaciones cercanas y la gente que pasa por el pasillo, pero no nos importo)

Comida en familia 8 adultos y un bebé,la cosa no empezó bien del todo,al llegar que estábamos solos baje un poco el volumen de la televisión ya que el bebé dormía,la camarera con cara de no tener muchas ganas de trabajar el domingo la subió,le dije que por favor si podía bajarla y el dice que no,que me cambie de sitio( en la misma.mesa,vamos 2 sillas más para allá) y por sus ovarios sube el volumen y me dice que cuando venga gente se tiene que oír le vuelvo a pedir que cuando venga gente la subimos y me dice que no y le da volumen. ( No llenaron mas de 2 mesas mientras comimos,otras 5 vacías sin servicio)
Pedimos menú casi todos y encimas nos cobran 2 aguas aparte del menú.
La comida no está mal, aunque precio elevado,18€.

Fuimos a desayunar y la experiencia no pudo ser más desagradable.
Nada mas entrar había un grupo de gente local del pueblo sin ninguna educación, gritando como animales, tuvimos que llamarles la atención en numerosas ocasiones para que se tranquilizasen.
Sobre el servicio ni hablemos, tardaron mas de media hora en servirnos una simple tostada con jamón y queso. Y cuando nos dimos cuenta, el queso estaba en mal estado, lleno de moho. Les informamos que el queso no estaba en buen estado y la respuesta del camarero fue que era así, tratándonos como si fuésemos tontos. No señor, no es queso Roquefort no tiene por qué tener moho.
Pedimos la cuenta y pagamos, ni tan siquiera nos quitaron el suplemento del queso de la tostada que ni nos comimos. Y cuando salimos por la puerta escuchamos al propio servicio insultarnos . Menuda educación y atención al cliente. Una pena porque ellos mismos crean su propia publicidad.

Respecto al trato que nos dieron una mañana desayunando fue inmejorable, la cercanía y el trato con el cliente te hace sentirte en casa.....contestando al comentario de Héctor, que decirle que no hay nada como estar desayunando entre amigas, y que llegue una mesa de 4 personas sin educación ninguna y en vez de pedir un poco de silencio o bajen la voz nos chisten como un pastor a las ovejas, ser personales locales no nos hace menos que usted, por llamarle de alguna forma.....y le resuelvo su duda, no todas éramos del pueblo, también había en la mesa una oseña y una modeña!!!!! Por cierto, nuestras tostadas y montados, con queso curado, fueron inmejorables, tanto que tenemos que volver este viernes otra vez a repetir!!!!!

Sin duda una relación calidad/precio excelente. Juan nos trató desde el primer momento con calidez y amabilidad y nos sentimos como en casa. Muy recomendable.

comido muy bien la elaboración muy buena y todo exquisito, es el mejor sitio ahora mismo para comer en Ruidera, menú del día sale a 18 euros por persona .

Estuve en este establecimiento con un viaje organizado.

Después de leer las reseñas anteriores y las respuestas publicadas, intuyo que dormí en una de esas "habitaciones antiguas”.

El colchón y la almohada estaban bien.

En la tele no se ven algunos canales, la 1 la 2 el 24h, y otros.

La alcachofa de la ducha hay que ir cambiándola ya.

Desde mi ventana solo se ve una pared y un ojo de patio.

En mi llavero venía una llave de la puerta principal por si llegábamos tarde. Positivo.

No tuve ningún problema con la temperatura, en mayo refresca por la noche, pero la cama está bien equipada.

Hay espacio de sobra para el equipaje, un armario y cajones de sobra.

El agua caliente llega rápido y con presión correcta.

No me quejo de la limpieza.

No avisé de ninguna deficiencia porque para una noche no me mereció la pena.

Solamente traté con una señora que hizo de camarera y de recepcionista. Muy simpática y amable.

La comida fue abundante. Por la carta se entiende que se puede comer muy bien aquí, aunque nuestro menú fue normal.

Es un establecimiento grande y estaba limpio, lo que representa un esfuerzo del personal que algunos clientes sabemos ver.

En la puerta hay aparcamiento a la sombra y está bien situado en el pueblo.

He pasado un fin de semana genial con mis hijos en las lagunas de ruidera, y este hotel tiene bastante que ver. Jose luis y su familia nos han tratado genial. Las habitaciones son amplias y comodas, y el menu que ofrece el restaurante es amplio y de mucha calidad.
Recomendable 100%.