Hostal San Marcos II

El hotel en si está bien pero el dueño no es bueno por qué le dije que de reservar dos semanas con el fin de semana y el Lunes 23/01/2023 me he tenido que buscar otro hotel por qué supuestamente tenia todo el hotel ocupado así que por mi parte no iré más a ese hotel

Estuve dos meses por razones de salud y mi suerte fue quedarme en este hotel al cual doy 5 estrellas por varias razones : barrio tranquilo y silencioso, habitaciones grandes y limpias, cercanía de restaurantes y tiendas, pero sobre todo gracias a MARTA, que se ocupa de todo con extrema amabilidad y disponibilidad. Sin ella no sé si el hotel funcionaría.

Tenía la reserva hecha por WhatsApp y al llegar, que había avisado de que llegaría un poco mas tarde y me dijeron que no había problema, no hay nadie. Me tienen bloqueado el teléfono ya que llamaba a varios números y en todos me salía no disponible menos mal que llamando desde el de mi marido pudimos contactar para que nos abrieran. El hostal, sin más, decente para pasar unas horas y descansar que fue nuestro propósito.

Se trata de un hostal con un precio ajustado para la ciudad de Guadalajara. Tiene una buena ubicación. Me resultó fácil encontrar aparcamiento. Sin embargo, discutí con el encargado por teléfono porque, pese a su insistencia en preguntar a qué hora iba a llegar, no estaba presente para recibirme. Me abrió la puerta un huésped. Me temo que este señor está acostumbrado a tratar con desdén a sus huéspedes y yo no fui la excepción. La puerta de entrada estaba muy sucia. Algún desaprensivo la salpicó a propósito. Por ello tuve que tomar un pañuelo de papel para empuñar el asa. No obstante, al día siguiente, cuando me marché, la señora de la limpieza estaba ya trabajando y la puerta seguía en las mismas malas condiciones. Me pareció una falta de respeto a quienes estábamos conservando la limpieza que dicha señora no hubiera empezado su trabajo limpiando los churretes de la puerta de entrada, por la cual íbamos a salir aquellos mismos que ya la habíamos sufrido la noche anterior. Cuando subí a la habitación me encontré que la puerta no funcionaba bien. Estaba en conversación telefónica con el encargado y se lo mencioné, el cual se puso a chulearme diciéndome que me fuera a otro hotel si no estaba conforme. Este señor no conoce la vergüenza, porque sin despedirse cortó la comunicación. Le escribí un mensaje de WhasApp y ni lo leyó. Definitivamente, un encargado borde y chuleta; y si es el propietario todavía tiene más delito tratando así a su clientela, que somos quienes le damos de comer. La colcha con manchas de grasa y el radiador no ha visto una bayeta en su vida. Por lo demás, la limpieza no estaba mal. Ahora bien, pasé miedo porque la puerta no cerraba bien. Conclusión: no pienso volver ni aunque me regale la estancia. Es más, creo que es más seguro e higiénico dormir en mi propio vehículo. Me quedé con gana de echarme a la cara al señor, a fin de mostrarle sus propias miserias in situ y no tener que hacerlo por aquí.

Sinvergüenzas, habéis dejado a mi madre en la calle con la excusa de que alguien había llegado con su nombre y apellido antes que ella, y como eso es error vuestro deberíais haberlo solucionado vosotros buscandole otra habitación en ese mismo hostal, en otro o al menos decirle dónde hay otro cerca, ya veo que no es la primera a la que le hacéis eso y que es vuestro modus operandi, si no os gusta la gestión de alojamientos haber estudiado!!!!

Bueno siendo mi último día aquí quisiera agradeceros lo bien que se aveis portado conmigo sois geniales hostal de diez seríedad de diez habitación de diez
llimpieza todo sois geniales me sentí como en casa gracias por todo espero volver a primeros de año un abrazo para todos y felices fiestas a este gran equipo

Habitación demasiado simples, muy viejo todo, trato nulo con el personal, limpieza, en conjunto con el local, Sobrio

Pequeña la habitación, muy sucio porque hasta habían cucarachas, extremadamente ruidoso y muy mal distribuida la habitación, no lo recomiendo en lo más mínimo, no le pongo menos estrellas porque no se puede. No es un lugar para descansar, cada vez que abrían la puerta principal del hotel, se sentía como si golpearan nuestra puerta. El colchón extremadamente duro como de piedra y las almohadas como apoyar los cabeza sobre rodillos de cocina. Reservamos para dos noches y debimos pedir el regreso del dinero de los segunda noche porque no pudimos soportar pasar dos noches allí.