Hotel Casa Rural La Marotera

Nos alojamos mi pareja y yo con un cofre vip y desde el primer momento la atención por parte de la dueña fue perfecta , la habitación con temperatura muy agradable desde el primer momento y durante toda la noche , limpieza absoluta y comodidad buena , el entorno es fantástico en plena naturaleza.
Un lugar increíble para desconectar .

Volveremos seguro.

DECEPCION TOTAL, "es lo que hay", es lo que nos contesto Pilar a todo lo que le pedimos,
hacia frio y nos dijo caramente que no ponia la calefaccion, que habia mantas,( no en todas las habitaciones), eramos los unicos que estaban alli, no habia mas huespedes.
La cena fue muy muy escasa, nos cobro 13€ a cada una de las 4 personas , nos quedamos con hambre y eso que una de ellan no cenó porque no se encontraba bien, una racion de ibericos es para Pilar 8 lonchas de chorizo , por cada racion 8 €, a euro por loncha, esto por poner un ejemplo. Mientras cenabamos correteaba un ratoncillo por el comedor.
En las fotos hay una zona comun, un salon con chimenea y unos sofas muy acogedores donde pensabamos pasar algun ratillo charlando, eramos tres parejas y nos tuvimos que meter en una habitacion fria a pasar el rato cuando se hizo de noche porque el salon lo tienen cerrado "por Covid", teniendo en cuanta que hemos estado el y 6 de noviembre de 2022 ,nos parecio un desproposito, cuando se lo comentamos volvio a decir "es lo que hay".
No es de extrañar que lo alquilen , tratando asi a la gente es imposible que les funcione, y no creo que con estas reseñas nadie se atreva a ir, nosotros "picamos" al ver las fotos.
Una pena , la verdad, el que lo coja va a tener que esforzarse mucho , cambiar los baños, los colchones( de muelles), las televisiones( del siglo pasado), aunque lo mas importante que tendrá que superar es la mala fama del establecimiento que deja su predecesora.
Despues de leer mi opinion espero quede claro que es un error alojarse en este establecimiento.
Habiamos elegido el hotel por el entorno, porque la verdad es que es precioso el lugar al igual que la casa pero su actitud de desgana y desidia nos empaño un fin de semana que hubiera sido perfecto.

Pues la verdad no sé por dnd empezar!! Lo único bueno q diría es q está limpio. Un regalo que vienes a disfrutar con mucha ilusion y te vas decepcionada ! Esta claro q ya no tienen ganas de llevarlo, de hecho se jubilan este año pero deberían de tener en cuenta que sus pocas ganas estropean la ilusión de los huéspedes y derrochan su dinero . Embarazada de 5 meses y he pasado unas noches malas en un colchón viejísimo , la TV no funcionaba y cuando lo hemos conseguido imagen verde , nadie nos ha dado más opciones , 2 desayunos y 2 cenas idénticas y muy pobres,el único salón para estar si no quieres estar encerrado en tu habitación cerrado por covid, pero hemos visto salir niños y adultos ,su familia por supuesto ! Ella es amable y el simpático pero no están pensando en nadie mas que en ellos......DECEPCION TOTAL, NADA RECOMENDABLE .

Leyendo las reseñas me daba un poco de miedo escoger esta casa rural. Menos mal que solo hice caso de las buenas críticas y me animé a reservar. El lugar es precioso, la ubicación maravillosa para disfrutar del pueblo y sus rutas. La habitación más que correcta, con la calefacción a tope (tuvimos que dormir por encima de las mantas) una habitación amplia y con todo en orden (incluidos los famosos colchones). Es cierto que la tele era vieja y que funcionaba regular, pero no he venido al campo a ver la tele, sino a escapar de la rutina y hacer caminatas, así que, nos dio igual. El desayuno a base de tostada con mantequilla/mermelada o tomate/aceite, con un minicroisant (de bolsa, pero de agradecer) y un café con leche. Pilar, la señora que nos atendió, correctísima en todo momento. No es muy habladora, pero no podemos pretender que todo el mundo sea la alegría de la huerta. Para nosotros ha sido un fin de semana estupendo y de desconexión. Y aunque no solemos repetir en los sitios, puede que hasta me plantee volver. Un saludo Pilar

Fuimos con un paquete de La vida es bella.
Cuando llegamos nos chocó el trato que recibimos. Poco agradable.
El hospedaje estaba bien: La habitación era normalita y estaba limpia.
Lo único que comimos fue el desayuno y era algo pobre, el tomate no era natural, si no de bote.
Tenia un cartel del menú diario (15€), me parece algo caro para la zona que es.
La verdad que deberían mejorar la atención a los huéspedes, seguro que ganaría muchas mas visitas.

Precio caro por una noche una persona 60€, la ducha no funcionaba tuve que ducharme con el grifo dónde va enganchada la dicha por qué el botoncito que hace que salga el agua por la alcachofa de la ducha no iba. Habitación amplia si aire acondicionado y se notó y mucho por qué hacía calor. Buena situación eso sí, sin piscina que se agradecería. En fin que ya me han visto otra vez.

Pongo una estrella porque no hay menos .
Llegamos y nos encontramos un sitio cutre ,sin luz habitación defasta con una cama que como te pusieras a hacer cardio se desmonta seguro, televisión de antes de Franco y viejo todo,sin aire acondicionado con el calor que hace y encima en toledo.y nos da un ventilador.veniamos a dormir y pasar el puente aquí .y cuando vimos lo que había nos fuimos de camino a otro sitio.
Cómo puede haber en los tiempos que estamos sitios así.esto tenía que estár prohibido y muy sancionado.de vergüenza.espero que esta reseña ayude a más de uno

Buen lugar si buscas despejarte del sonido de la ciudad, muy tranquilo, la comida muy casera y al momento, buena presencia, un aroma a paz y relax... recomendado 🥂