Hotel Torcal

La ubicación del hotel lo favorece mucho para una parada a descansar sin salirse mucho de la ruta.
Tiene un gran parking donde caben muchos vehículos incluso he visto un trailer aparcado dentro.
En los alrededores no hay mucha oferta gastronómica cerca, por lo que no te queda otra que comer en el restaurante del propio hotel, la verdad que para mi tanto el servicio como la comida no era muy profesional. Se notaba algo de desorganización y la comida no fue para tanto, también cabe destacar que el precio del Menú es de 12€ por lo que siendo un hotel no se puede exigir mucho a este precio.
Las habitaciones muy bien, estuve 2 noches separadas por lo que en cada una me ha tocado una habitación diferente, la primera con 2 camas individuales, y la segunda vez una de matrimonio. En general tanto la limpieza, la comodidad de las camas como la distribución muy bien.
Al estar bastante cerca de la carretera temía el ruido del tráfico, pero apenas si escucha y se puede descansar muy bien.

Una experiencia inolvidable solo entrar los precios cada segundo cambian.
Las habitaciones bueno excepto que se caen las puertas y desgaste. Podrían tener mantenimiento intenso.
La comida como en casa a lo simple y rápido, por poner mas cantida no se moririan al precio que lo ponen🤯. Ni con cariño lo hacen.
NO VALE LO QUE SE PAGA

Hotel acogedor y confortable, las habitaciones sencillas pero comodas, lo mejor, su personal tanto las cocineras, como el personal de limpieza, y sobre todo a destacar su personal de recepción, destacando Susana por su profesionalidad y amabilidad, sin duda volveremos.

El hotel es correcto calidad/precio.El personal muy amable.Mi problema ha sido el aire acondicionado,si lo pones te hielas y si no lo pones te asas.Y el grifo de la ducha no se sujeta arriba.Por la noche había un olor muy extraño en la habitación que creo que salía del conducto del aire.
La comida del restaurante normalita pero muy rico.Bien de cantidad y de precio.
Estaría muy bien si controlaran los detalles.Esta muy limpio.
Volvería en cualquier caso.

Tenía una reserva hecha con dos meses de antelación, llamé en repetidas ocasiones para pagar la habitación, nos dijeron que no era necesario. Cuando llegamos el día de nuestra reserva no teníamos habitación. Por lo que considero una gran falta de profesionalidad, además cuando nos fuimos a marchar la recepcionista nos ofreció una habitación más caras del precio acordado.
Tuvimos que ir al hotel Meliá.

Al personal de recepción de por la mañana ni lo vimos, una cama de matrimonio pequeña e incomofa.el desayuno ( calidad precio ) nefasto. El cuarto de baño , muy pequeño. En fin debería estar catalogado cómo hostal y no como hotel de 3 *.

No he visto peor hotel que este entras y está como en lis años 80 alfombras en los pasillo llenas de manchas cada 3 pasos que das.. La recepcion y la cafetería juntas con una olor en la entrada del hotel a nata o leche agria.. Habitaciones con unos colchones que es preferible dormir en el suelo.. Manchas en las paredes.. La puerta del cuarto de baño no se puede cerrar.. No molestaros ni mirar el hotel.. Para mi a sido Un experiencia nefasta.. Lo siento ero así es.. Nada recomendable.. Po go una Estrella solo pirque no da opción ninguna

Para ser un hotel de polígono no está mal, aún que las instalaciones dejan mucho que desear.
En cuanto a estancias largas, preferiría algo mejor ubicado y más confortable.
Para una urgencia, una oferta o un equipo de fútbol te hace el apaño, pero el precio me parece elevado para lo que ofrece.