La Última Casa Masboquera

Descubrir esta preciosa casa ha sido como descubrir una burbuja de paz y armonía. Fuimos a pasar un pequeño descanso navideño tras mi cumpleaños y Dayna nos recibió con una maravillosa sorpresa (pastel, vino, decoración y una maravillosa canción de felicitación). Nos encontramos la casa equipada hasta el más mínimo detalle y cuando digo mínimo me refiero a toallas de playa para nosotras y nuestra mascota, crema solar, antimosquitos, una preciosa bandeja preparada con agua en el dormitorio, patucos para el frío, la chimenea encendida... y así innumerables detalles.
Pero no todo es lo bonito, pues soy una persona bastante práctica... La funcionalidad de la casa es exquisita y la cocina bien equipada con todos sus elementos.

Sin duda volveremos, por la maravilla del alojamiento y del entorno (playa y montaña cerca) además de por la calidez de Dayna con nosotras y con Bali, nuestra mascota, a la que trató con especial cariño.

Una maravillosa casa en un pueblo tranquilo. Buscamos un nidito para un fin de semana de descanso y desconexión y lo conseguimos en la Última. Dayna fue una anfitriona 10 y nos sorprendió con detalles románticos que nos ilusionaron mucho. Un 10/10 recomendable 100%

Una casa que irradia tranquilidad, quietud, descanso, es un lugar que ha sido preparado con amor y cariño por sus dueños y encantadores anfitriones, Dayna & Oscar. Sientes calor de hogar, con detalles que brindan comodidad, confort y bienestar. Me fascina su localización porque esta rodeado de naturaleza, y puedes disfrutar sus caminos verdes y sus colinas y contemplar toda la hermosura desde la cima. Recomiendo esta casa para escapar de tu rutina de ciudad, para unos días románticos de pareja, para inspirarte a escribir, para reencontrarte o simplemente para no hacer nada!! Yo quiero volver a vivir esta experiencia y te aseguro que a ti también te pasará igual!

Gracias Dayna & Oscar por brindarnos ese espacio mágico!

Una casita muy agradable en un sitio muy tranquilo cerca de montañas solitarias y de la playa. Por la noche podrás calentarte con el fuego de la chimenea. La anfitriona es muy amable.

Una casa en la montaña (muy cerca de la playa) rodeado de naturaleza y rutas para caminar, con una inmensa tranquilidad, con un clima muy acogedor; su chimenea, la decoración, los pequeños detalles, la atención, ha hecho de esta experiencia inolvidable, volveremos seguro!

Es una casa que te enamora, cada rincón un detalle, cada detalle una sensación de hogar. La verdad que es una pasada. Te reciben con una sonrisa y están siempre atentos para que no te falte de nada. A sido una estancia perfecta.

Acogedora, lugar muy tranquilo, nos gustó mucho pasar el año nuevo! Sin duda volveremos. La dueña un encanto😘 nos tenía de bienvenida una botellita de cava, chocolates y un panettone, lindo detalle gracias.

Muy buena atención. La casa está muy limpia y cuidada. Entorno tranquilo