Hotel Rural Mas de l'Illa

Se trata de una casa convertida en hotel rural en medio de campos ecológicos de melocotoneros y nectarinas. La atención personal es muy amable y atenta, con recomendaciones sobre la zona. Hay un paseo precioso en la isla del Ebro que está a 5'. La habitación era moderna y limpia, con una buena calefacción, vistas a los campos y una cama cómoda (sin TV, por si a alguien le importa). El conjunto supone una estacia muy agradable.

Super bonito y moderno. El hotel y los alrededores son espectaculares y el servicio también. Mención especial al desayuno, con muchas cosas hechas por ellos. Muy recomendable.

El lugar es muy tranquilo , muy limpio. La habitación amplia y el desayuno completo con productos de calidad. El personal muy amable

Hotel pequeño y acogedor decorado con gusto y muy bien ubicado para visitar los diversos puntos de interés que hay por la zona. Destacar la amabilidad de sus trabajadores y el desayuno que estaba realmente bueno.

Encantador hotelito en un paisaje único, rodeado de árboles frutales y muy cerca del río Ebro. Las puestas de sol des de la terraza del hotel son espectaculares.
Hemos disfrutado muchísimo del desayuno y hemos dormido como bebés. Las habitaciones son amplias, muy limpias y con una decoración exquisita.
La chica que nos recibió fue muy amable y atenta en todo momento.
Nos ha encantado y seguro que repetiremos ☺️

Tanto las habitaciones como las instalaciones y el entorno están cuidados al detalle. Todo está nuevo y muy limpio. El desayuno es espectacular en variedad y calidad, y el personal es muy amable y atento. Ideal para desconectar por la tranquilidad que ofrece el entorno y el ambiente creado en el alojamiento en general.

Espectacular Masía estilo catalán, modernizada y con una decoración exquisita. El lugar es idílico, envuelto de cultivos frutales y a la vera del río Ebro, donde se ubica un islote para poder visitar. El trato es muy acogedor. El silencio por la noche y durante el día hace de este lugar un sitio para descansar durante un fin de semana, solo o en pareja.

Y destacar el brutal desayuno que ofrecen, con productos de la tierra, de proximidad, zumos recién exprimidos, embutidos de la zona, y fruta de los propios campos de la finca.

Sin duda una nueva joya recién aparecida en la zona, y que cuenta con una Suite con bañera gigante, ideal para una escapada romántica, donde mi chico y yo pasamos una noche de ensueño.

Su dueña, Laia, lo lleva todo al detalle e intentó que estuviéramos de lo mejor en todo momento! Sin duda, sea porque vais de paso, como para desconectar de cualquier bullício de la ciudad. Este es el lugar de escapada perfecto

Ha superado nuestras expectativas, y eso que ya eran buenas. Desde el trato, las personas, el precio, las instalaciones, sus alrededores, las vistas, la puesta del sol desde el Ebro, al desayuno... no podría darle mejor puntuación. Mi marido y yo hemos quedados muy contentos de haber escogido este lugar para nuestra escapada en pareja. Esperamos volver! Gracias!