La casa es muy bonita y el entorno maravilloso. La habitación, la superior abuhardillada de arriba, es amplia y con una cama fantástica. La ducha no funcionaba y no tragaba el agua, eso es incómodo. El desayuno es espléndido aunque muy caro, 14 euros, para ser una casa de pueblo. Como negativo a resaltar la música por toda la casa todo el tiempo, con canciones modernas, en un sitio donde lo único que te apetece escuchar es "nada", el sonido de los pájaros y el silencio más absoluto... Sorprendente También el modo de dejar todas las llaves de las habitaciones en la entrada, ya que no te dejan llevártela, y cualquiera puede cogerlas mientras no estás. A destacar que la amabilidad de la dueña no es uno de sus fuertes. En cuanto al servicio, la chica que nos sirvió el desayuno, es encantadora, menos mal.
Angeles garcia cardona2 años atrás
Una casa rural preciosa. Nos encantó el diseño, la decoración y María Rosa; la dueña, una persona amable, servicial y que te aconseja sitios para visitar, restaurantes... Una mujer entrañable. Así salió todo... ESPECTACULAR!!! Si volvemos iremos a visitarle. Ahhhh!!! Se duerme y desayuna genial. Y está sólo a 10 minutos de la playa de las catedrales.
Mario Paredes Campo2 años atrás
El sitio es un auténtica maravilla en una pequeña aldea gallega. Más tranquilidad imposible.
La habitación moderna y cómoda. La atención de María Rosa no puede ser mejor, ayudándonos en todo momento en nuestras visitas por la zona.
El desayuno, aunque un pelín caro, merece la pena. Todo casero y abundante.
Iria Vázquez-Guillén2 años atrás
Nos encantó estar allí cuando fuimos a visitar Ribadeo. Está a tan solo 5 km de RIBADEO y en un enclave único en una aldea tranquila. La casa tiene una decoración muy cuidada y el trato muy familiar. María Rosa la dueña nos atendió de un modo personal y nos hizo grandes recomendaciones.
Marina Pasarin2 años atrás
Si te gusta la tranquilidad este es tu sitio. Decoración exquisita y buenos consejos de la dueña para que la estancia sea agradable.
Virginia García Elorz2 años atrás
Preciosa casa , decorada con buen gusto , la habitación y el baño estupendos. El desayuno excelente. La dueña encantadora , muy atenta y amable . Volveré !!
Alejandro2 años atrás
Casita rural de 9 habitaciones en un lugar muy tranquilo, con zonas verdes alrededor. La cama muy cómoda, pero el frigorífico hacía mucho ruido para dormir y olía a humedad. La atención del personal fue muy buena. La presión del agua estupenda, aunque el agua salía de color amarillento. El desayuno por 5€ estupendo. Es tipo buffet, sólo que con las medidas covid, vas pidiendo y te van sacando en vez de servirte tú. Dependes del coche para ir a comer/cenar. Recomendable.
MV MV2 años atrás
Se escuchan todos los ruidos de la habitación de al lado, incluyendo los ronquidos. En cuanto un huésped se levanta te enteras porque los suelos crujen y las paredes entre habitaciones son de papel, la recepción no está en un apartado sino en el medio de la entrada a la casa, con lo que las conversaciones se de escuchan desde la habitación. Pagar 100€ la noche -desayuno no incluido- (y otros 10€ del desayuno) sin tener insonorizadas las habitaciones me parece un exceso. Es una casa de pueblo bonita, no un hotel rural preparado para alojar a varios huéspedes y cobrar esos precios.
Las ventanas no cerraban bien y entraba claridad en la habitación.
Como negativo a resaltar la música por toda la casa todo el tiempo, con canciones modernas, en un sitio donde lo único que te apetece escuchar es "nada", el sonido de los pájaros y el silencio más absoluto... Sorprendente También el modo de dejar todas las llaves de las habitaciones en la entrada, ya que no te dejan llevártela, y cualquiera puede cogerlas mientras no estás.
A destacar que la amabilidad de la dueña no es uno de sus fuertes. En cuanto al servicio, la chica que nos sirvió el desayuno, es encantadora, menos mal.
Nos encantó el diseño, la decoración y María Rosa; la dueña, una persona amable, servicial y que te aconseja sitios para visitar, restaurantes... Una mujer entrañable.
Así salió todo... ESPECTACULAR!!!
Si volvemos iremos a visitarle.
Ahhhh!!! Se duerme y desayuna genial. Y está sólo a 10 minutos de la playa de las catedrales.
La habitación moderna y cómoda. La atención de María Rosa no puede ser mejor, ayudándonos en todo momento en nuestras visitas por la zona.
El desayuno, aunque un pelín caro, merece la pena. Todo casero y abundante.
La dueña encantadora , muy atenta y amable . Volveré !!
La atención del personal fue muy buena.
La presión del agua estupenda, aunque el agua salía de color amarillento.
El desayuno por 5€ estupendo. Es tipo buffet, sólo que con las medidas covid, vas pidiendo y te van sacando en vez de servirte tú.
Dependes del coche para ir a comer/cenar.
Recomendable.
En cuanto un huésped se levanta te enteras porque los suelos crujen y las paredes entre habitaciones son de papel, la recepción no está en un apartado sino en el medio de la entrada a la casa, con lo que las conversaciones se de escuchan desde la habitación.
Pagar 100€ la noche -desayuno no incluido- (y otros 10€ del desayuno) sin tener insonorizadas las habitaciones me parece un exceso. Es una casa de pueblo bonita, no un hotel rural preparado para alojar a varios huéspedes y cobrar esos precios.
Las ventanas no cerraban bien y entraba claridad en la habitación.
La persona de recepción encantadora, eso sí.