Casa Susa

Estuvimos de vacaciones a finales de julio, el trato es excelente, muy familiar y acogedor, nuestra hija jugaba por las tardes con el hijo de los dueños. El apartamento era muy cómodo y limpio. Mención especial para el restaurante, las cenas y los postres eran espectaculares.

Excelente!!! Desde el primer contacto que tuve con Michelle hasta el último día.. fue un trato muy cercano, nos sentimos muy a gusto desde ella que es una gran mujer , su marido , la encantadora Susa y sus grandes chicas. Pendientes de nosotros en todo momento. Un lugar con un encanto muy personificado, se ven detalles en cualquier rincón. Si a mayores le añades la estupenda cocina casera, no te quieres mover de allí. Desde la riquísima mariscada, el arroz con zamburiñas, pulpo y langostinos, para chuparse los dedos.. y los postres.. jjjj de 10!!!! Totalmente recomendable, un lugar con encanto propio 🥰.

Buen trato, comida rica y abundante. El restaurante tiene una estética muy cuidada al igual que la zona de hospedaje. Volveremos!!

A mí me ha gustado mucho. Pedimos cordero, cochinillo y merluza a la cazuela. El precio bajo/medio y las raciones enormes. Hay un postre, O Brigadeiro, que está de muerte.

Es un lugar fantástico, tanto las habitaciones como las zonas comunes tienen un encanto especial. Es un lugar que transmite paz y buena energía, se nota que esta cuidado con mucho mimo y dedicación. Los dueños y todo el personal son una autentica maravilla, te hacen sentir como en casa y el trato es EXTRAORDINARIO. La comida es una autentica pasada, calidad suprema y elaboración excelente, sin duda un lugar donde repetir una y otra vez. Sin lugar a duda es un gran sitio tanto para alojarte como para ir a comer o cenar.

Pareja encantadora. Michelis es un cielo, cercana, agradable y cariñosa. El apartamento novísimo, precioso. Las zonas ajardinadas e infantiles son lindísimas. Una estancia de 10 que recomendamos y que volveríamos a repetir si fuéramos a la misma zona.

Estuvimos un grupo de personas en un campeonato de fútbol sala femenino. El trato fue excelente, muy familiares. La comida estupenda. Es un sitio con encanto y las habitaciones están decoradas con mucho gusto. Para repetir

Un gran descubrimiento para pasar unos días descansando y disfrutando en tierras gallegas. Mi pareja había estado previamente por trabajo y se sintió como parte de la familia así que volvimos juntos sin dudarlo. Las habitaciones son muy acogedoras y bonitas, nosotros estuvimos en una con un balcón precioso, la cama de matrimonio era muy cómoda. La casa es muy bonita con unos espacios comunes muy bien cuidados.
Excelentes desayunos caseros, con fruta, yogures, bizcochos, zumo natural…
Con un fabuloso restaurante para poder degustar la gastronomía de la zona.
Buena ubicación para conocer las Rías Baixas y sus alrededores.
Pero lo mejor sin duda es el trato y la hospitalidad de Nardo, Michelle y todo su equipo que te hacen sentir como en casa. Volveremos sin dudarlo!