Airas Nunes PR3 Pousadas de Compostela

Hotel en pleno centro de Santiago, junto a la Catedral. Las habitaciones son amplias, limpias y muy bonitas. De bienvenida tiene agua, café e infusiones en la habitación. Hay un parking cerca y está concertado con el hotel. Sitio muy recomendable

Excepto la novedosa peculiaridad de llamada al interfono que tengas que hacer así la reserva, todo fueron atenciones, lugar para guardar mi e-bike, la cafeteria Irás Nunes al lado, decoración exquisita de la habitación, "agua caliente" esencial para recuperarse un peregrino empapado, secador para salir a cenar con lluvia ideal me encanta cuando respetan las estructuras antiguas, los arcos de contrapeso,es decir me recomendaron en una tienda al lado con una extraordinaria mujer velezolana que me dio también cobijo y acertó al darme la información fui a agradecerselo a la mañana siguiente pero tenía el turno de tarde, me atendió una chica Argentina a la que compre artículos para la familia. Y todo a pocos metros de la Catedral, donde visite a mi amigo de aventuras durante los doce días de peregrinación.
Mi querido Santiago.

Precioso hotel en una ubicación inmejorable. Limpieza y comodidad en el corazón de Santiago a pocos metros de la Catedral.

El Hotel no está mal pero cuando terminas de hacer el Camino de Santiago lo que menos te apetece es tener que subir 3 plantas hasta la habitación porque no tiene ascensor.
Tampoco me pareció bien que no tiene servicio de recepción, nadie te atiende en persona, tienes que registrarte tú y te dan un código para entrar en la habitación, eso si a partir de las 15h, ni un minuto antes.
La habitación es aceptable pero en cuanto se hace de día, entra mucha luz.

Habitacion gigante ,camas muy cómodas, baño con bañera, y secador, vistas impresionantes. Lo malo que no tiene ascensor. Está justo al lado de la catedral y en plena zona de restaurantes. Pero no afecta para nada al descanso. La recepción muy bien nos llamó el día anterior para explicar todo .precio calidad inmejorable

Excelente y acogedor hotel situado a pocos metros de la Catedral.
No tiene recepción, pero a través de un interfono situado en la puerta te puedes comunicar con su personal 24 horas. Buen y eficiente servicio telefónico igualmente.
Fueron muy amables dejándonos depositar nuestras maletas al llegar antes de tiempo, y cediéndonos una taquilla en nuestro último día.
En el nivel de calle hay una cafetería muy chula para desayunar, al tratarse de un edificio estrecho por su antigüedad, no tiene ascensor.
No conocíamos la cadena, repetiremos con ellos en futuros viajes a Galicia.

Excelente ubicación, a dos minutos andando de la catedral. Habitaciones muy limpias y amplias. Las camas son muy cómodas. Todas las habitaciones disponen de una pava eléctrica y un surtido de tés y cafés gratuitos. Lo peor es que no tiene ascensor y es un poco complicado subir maletas un poco grandes por las escaleras.

Sitio super acogedor y limpio, pegado a la catedral. Perfecto para pasar unos días en Santiago